El fin de las ayudas desploma las ventas
Los datos de matriculaciones de vehículos durante el mes de julio que se dieron a conocer ayer confirman que las cifras positivas de los últimos 10 meses han sido solo un espejismo de la recuperación en un sector que depende de los incentivos a la compra para mantener el nivel de ventas.
El agotamiento de los fondos consignados en ayudas a la compra de automóviles contempladas en el Plan 2000E y la entrada en vigor de la subida del IVA del 16% al 18% que encarece el precio de los coches en torno a los 400 euros, han provocado una caída generalizada de las ventas del 24% de media. Solo Canarias y la Comunidad de Madrid -donde el Gobierno autonómico mantiene un descuento del 20% en el impuesto de matriculación- terminaron el mes en positivo con un incremento del 25,5% y del 1%, respectivamente.
En el conjunto de la Comunidad Valenciana la caída fue del 35,3% de acuerdo con los datos de la asociación nacional de fabricantes (Anfac) y vendedores (Ganvam). La provincia de Valencia registró el descenso más acusado de la región con una bajada del 45,5% con respecto al mismo mes de 2009, seguida de Alicante (-23,4%) y Castellón (-18,6%). Por operaciones de venta, la Comunidad realizó 6.587, lo que supone 3.738 operaciones menos que en julio del año pasado.
Representantes de los concesionarios afirmaron que "se esperaban estos malos resultados" y que según sus previsiones, las ventas seguirán desplomándose durante el resto de 2010 y el primer semestre de 2011.
La asociación de concesionarios oficiales advirtió, además, que las visitas del público a los puntos de venta se redujeron en un 75% durante el último mes en relación con la media de los anteriores.
A pesar de la caída de las ventas en julio, el porcentaje acumulado de 2010 arroja resultados positivos con respecto al año pasado en las tres provincias de la Comunidad con un total de 72.773 operaciones. Valencia, presenta el incremento más bajo del territorio con un 16,35% frente al 76,90% de Castellón y el 57,61% de Alicante. Aunque las ventas de los primeros siete meses de 2010 superan a las del mismo periodo de 2009, las operaciones de julio bajan por primera vez en diez años de la barrera de los 100.000 vehículos al situarse en 82.167 automóviles vendidos.
La asociación de vendedores ha solicitado una reunión urgente con el ministro de Industria, Miguel Sebastián, para evitar un semestre en negativo y la pérdida, según sus estimaciones, de 10.000 puestos de trabajo
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