Los partidos catalanes piden "hechos" a Zapatero y muestran su desconfianza

La resaca de la visita del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a Barcelona ha dejado un reguero de recriminaciones. Nadie parece creer su promesa de que hará todo lo posible para mejorar el encaje de Cataluña y España le cueste lo que le cueste, empezando por los suyos. El presidente de la Generalitat, José Montilla, alabó ayer el "posicionamiento" de Zapatero, pero le recordó que no es suficiente. En opinión del presidente catalán, falta un "cambio de actitud del conjunto de las instituciones del Estado respecto a Cataluña".

Montilla lanzó la recriminación a Zapatero en Girona, donde confirmó al consejero de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, como cabeza de lista en la provincia para las elecciones autonómicas, como ya estaba previsto. Nadal es uno de los históricos del Partit dels Socialistes (PSC), un peso pesado dentro de la corriente más catalanista y uno de los consejeros que no acudieron el viernes a la conferencia de Zapatero.

El presidente de Convergència i Unió (CiU), Artur Mas, también cargó las tintas contra el presidente del Gobierno, al que dijo no creer. "Le llaman como si sus palabras pudiesen ofrecer alguna credibilidad, cuando ya no le creen ni ellos mismos", señaló. Y fue más allá: "Es evidente que la sociedad catalana, buena parte de la española y media humanidad ya no le creen".

En la misma línea, su socio de Unió Democràtica de Catalunya (UDC) Josep Duran i Lleida, apoyo fundamental de Zapatero en Madrid, acusó al presidente de ser un "encantador de serpientes". Le recordó que Cataluña, además de ser escuchada, "también debe ser atendida" y le recriminó haberla engañado "no una, ni dos, ni tres, sino muchas veces". "No es suficiente con buenas palabras, sino que se necesitan hechos", añadió. El secretario general de Iniciativa (ICV-EUiA), Joan Herrera, lamentó en Tarragona que "el PSOE no quiera entender a Cataluña, a los catalanes y lo que se votó".

Tanto Mas como Duran participaron ayer en el consejo nacional conjunto de CDC y UDC, que celebraron en Lloret de Mar (Selva). Ambos confirmaron la lista a las elecciones autonómicas. El número dos lo ocupa finalmente Joana Ortega, actual portavoz de Unió en Cataluña. La ex consejera Núria de Gispert, cuyo nombre había sonado para este puesto, finalmente irá en el número 12 y será la candidata a presidir el Parlament.

A Ortega le siguen dos personas de confianza de Mas, Felip Puig y Meritxell Borràs. Finalmente, el ex consejero Ramon Espadaler, de Unió, se hace con el número cinco, a pesar de los intentos del alcalde de Vic, Josep Maria d'Abadal, de ocupar su lugar. Este irá en el 17º.