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La renovación del Tribunal Constitucional

Más jueces que catedráticos

Los favoritos para cuatro puestos: dos hombres, una mujer y una incógnita

Natalia Junquera

Son 4 mujeres y 16 hombres. Cinco son o han sido magistrados del Tribunal Supremo, otros cuatro son jueces, siete son catedráticos -solo uno de Constitucional- uno es profesor y tres, abogados. Esa era la composición del casting celebrado el jueves en el Senado para cubrir cuatro plazas en el Constitucional.

El 30 de agosto se cumplen 30 años de la puesta en marcha del alto tribunal. Nueve de los miembros de aquel primer tribunal eran catedráticos. Hoy son cinco. Los jueces del Tribunal Supremo, los candidatos que suele preferir el PP, han ido ganando presencia en la institución, frente a juristas procedentes de la Universidad. El Consejo General del Poder Judicial, que elige a dos miembros del TC, escoge siempre en el Supremo. Los puestos que nombran Gobierno, Congreso y Senado (otros diez) son pues, la vía para introducir el perfil académico en el tribunal, pero también en estos casos se han ido imponiendo los jueces, lo que incomoda a los catedráticos de la institución y cuyo malestar han hecho llegar al Gobierno. La presidenta, María Emilia Casas, es catedrática, como todos los presidentes anteriores, pero el próximo podría ser, por primera vez, un juez del Supremo. Carmela Silva (PSOE) considera "sorprendente" que cada vez haya menos académicos en el tribunal, y asegura que entre los 20 candidatos examinados el jueves, la mayoría era "gente progresista".

"Que sea mujer es un valor añadido", dijo Silva (PSOE) a la magistrada Roca
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Tres de los cuatro favoritos de esos 20 aspirantes han pasado por el Supremo. Uno de ellos es su ex presidente, José Francisco Hernando, de 74 años, el más próximo al ideario del PP, el que redactó un informe contra el Estatuto de Cataluña que no era preceptivo y que nadie pidió y dijo aquello de que "aprendería catalán como sevillanas en Andalucía". Fue el único al que no saludó la portavoz socialista el jueves. Pío García-Escudero, en cambio, pareció despertar cuando le tuvo enfrente, después de haber despedido con un "le deseo lo mejor" a casi todos los demás. Para Hernando, el portavoz del PP tenía una frase distinta: "Espero que no se rompa la racha en el futuro de que los ex presidentes del Supremo pasen al Constitucional". Hernando, por supuesto, es de la misma opinión. Preguntado por Carles Bonet, de ERC, el ex presidente del Supremo aseguró no tener "ningún prejuicio contra las territorialidades de España". Pero Bonet no le creyó. "Me respondió un poco desafiante. Nosotros no podemos apoyar a esta persona, al que el Estado de las autonomías le produce urticaria", dijo después.

Otra de las candidatas mejor posicionadas es Encarna Roca, magistrada de la sala primera del Supremo, favorita por ser mujer - "El Constitucional necesita tener el mismo número de mujeres que de hombres. Ese es un valor añadido que tiene usted", le dijo Silva- y por contar con el apoyo de CiU y PSC. Roca, catedrática de Civil, habló con entusiasmo de su trabajo en el Supremo -"¡Es fascinante! ¡Lo mejor que he hecho en mi vida!"- y aseguró que había sido "la primera mujer en muchas cosas". De los 47 magistrados que han pasado por el Constitucional solo tres eran mujeres. El tercer favorito, aunque él no se veía -"No creo, no creo", repetía al salir-, es Ángel Juanes, presidente de la Audiencia Nacional, donde dijo estar "muy a gusto e ilusionado". Propuesto por Extremadura, recordó que había sido letrado del TC, y magistrado en la Sala Militar del Supremo. "Es un claro candidato", dijo Jordi Vilajoana (CiU).

El cuarto favorito es en realidad una incógnita. No está en la lista. Es la X que debe despejar el PP después de haber sido eliminado uno de sus dos candidatos.

A la izquierda, Francisco José Hernando, ex presidente del Supremo y único candidato apoyado por el PP. A la derecha, Ángel Juanes, actual presidente de la Audiencia Nacional y propuesto por el PSOE en Extremadura.
A la izquierda, Francisco José Hernando, ex presidente del Supremo y único candidato apoyado por el PP. A la derecha, Ángel Juanes, actual presidente de la Audiencia Nacional y propuesto por el PSOE en Extremadura.L. S.

FRANCISCO COBO: "Mi programa: El Quijote"

Presidente de la sección segunda de la Audiencia Provincial de Navarra, comunidad que le propuso, insistió mucho en que era un aspirante independiente, cuyos méritos eran de naturaleza "exclusivamente jurisdiccional y no por ningún cargo de campanillas". Recordó que es miembro del Consejo Consultivo de Jueces Europeos, que asiste a nuevas democracias, y quiso terminar con una cita de El Quijote, que definió como su programa: "Si acaso doblares la vara de la justicia, no sea con el peso de la dádiva, sino con el de la misericordia". Zubia (PNV) destacó que hubiera nacido un 6 de diciembre, Día de la Constitución. "¡Quién mejor que usted para ser miembro del TC!", bromeó.

NICOLÁS MAURANDI. Educación para la ciudadanía

Propuesto por Murcia, destacó sus 33 años de actividad jurisdiccional. Citó trabajos sobre mobbing en la función pública y la discriminación de la mujer. En el Tribunal Supremo desde 1999, encargado de temas relacionados con los derechos fundamentales, explicó que ha dictado unas 1.300 sentencias, entre las que destacó la que por vez primera anuló los nombramientos de magistrados del Supremo y la de educación para la ciudadanía. Todos los portavoces elogiaron su currículum pero uno le advirtió: "Ya sabe que son muchos los llamados, pero solo cuatro los elegidos".

FERNANDO VALDÉS. Los contrapesos políticos

Catedrático de Derecho Laboral propuesto por Madrid, presumió de ser "el segundo laboralista más citado". Dijo que en España no ha habido muchos buenos científicos, pero sí magníficos juristas y "si hubiera un Nobel en ese territorio científico, seguro tendríamos más de dos". Carles Bonet (ERC) le echó un jarro de agua fría: "El problema es que la ciencia y la política son muy diferentes y los contrapesos políticos decidirán su idoneidad". Él no se arredró: "Estoy absolutamente enamorado de mi profesión".

ÓSCAR BOSCH: "Para un canario como yo..."

Confesó que llegó a la judicatura tras una "grave crisis vocacional" al terminar primero de arquitectura. Fue juez 15 años y consejero del Consejo Consultivo de Canarias, con Adán Martín (CC). Citó como mentor al jurista Gumersindo Trujillo, al que Bonet (ERC) definió como "un amigo de las comunidades autónomas". García-Escudero le dijo que él era arquitecto, aunque no ejercía. Bosch concluyó diciendo: "Para un canario como yo acceder al Constitucional sería un salto cualitativo impresionante".

ÓSCAR GONZÁLEZ. El hombre de las 5.000 sentencias

Superó con creces el límite de siete minutos para exponer sus méritos. Más de la mitad del tiempo se le fue en insistir en que los canarios deben entrar en las instituciones más importantes del Estado. Evocó las primeras elecciones democráticas, como presidente de las juntas electorales. En el Supremo desde 1995, en la sala de mercados regulados, formó parte de la comisión mixta entre este tribunal y el Constitucional para "limar asperezas que se producen de cuando en cuando". Vilajoana (CiU) elogió sus 5.000 sentencias.

LUIS ORTEGA ÁLVAREZ. Padre de un Estatuto fallido

Fue asesor jurídico del primer Gobierno de Felipe González. Durante su intervención, este catedrático de Derecho Administrativo recordó que era el padre del borrador del proyecto de nuevo Estatuto de Castilla-La Mancha, frustrado en el Congreso por un desmarque del PP. Bonet intentó reconfortarle: "Como catalán y como senador, lamento que no haya podido llegar a buen puerto. Esperemos que todo esto se subsane y que todo el mundo crea, y no solo de boquilla, en el Estado de las autonomías".

Mª CARMEN CATALÁN. Experta en violencia machista

Abogada, especializada en temas de violencia de género, acoso laboral, derecho de familia, y miembro de la Asociación de Mujeres Juristas Themis desde 1998, fue propuesta por IU en el Parlamento andaluz. Recordó que es asesora jurídica del Ayuntamiento de Puerto Real (Cádiz), cuyo alcalde, José Barroso, se metió recientemente en problemas cuando dijo: "El Rey es una excrecencia que hay que extirpar". Fue doblemente felicitada por los portavoces del Senado por ser una de las cuatro candidatas.

NEMESIO BARXA. Modificar la Constitución

Fue uno de los dos únicos abogados que se presentaron al casting. Propuesto por Galicia, dijo que "nunca" había tenido "ansias de pertenecer a la carrera judicial" porque se sentía más útil en la defensa de los derechos humanos siendo abogado. "Desde la dictadura" dijo, intentó enfrentarse "a cualquier atropello", como "las expropiaciones que se realizaban en Galicia para embalses y para establecer industrias, muchas contaminantes". Añadió que le gustaría entrar en el alto tribunal para tratar "las posibilidades de modificar la Constitución".

JOSEFA OTERO SEIVANE. Formación de guardias civiles

Magistrada en la Audiencia de Ourense, propuesta por el Parlamento de Galicia, destacó de su currículum que había dictado 3.581 resoluciones definitivas, de las cuales 1.732 son sentencias civiles y 883 penales. Compagina el cargo con el de presidenta del jurado provincial de Expropiación de Ourense desde 2008. Y fue ponente de cursos de formación para agentes de la Guardia Civil y jueces de paz. Fue recibida con entusiasmo por la portavoz socialista, Carmela Silva, por ser mujer y viguesa, como ella.

MANUEL ORTELLS RAMOS. Ex secretario de Educación

Confesó que el examen en el Senado le había provocado "cierta angustia". Catedrático de Derecho Procesal se preguntó a sí mismo durante la exposición de méritos, "¿qué puede aportar un procesalista a la tarea del Tribunal Constitucional?". Más tarde, le tranquilizaría el senador Joseba Zubía (PNV): "Lo ha hecho usted muy bien". Propuesto por las Cortes Valencianas, fue secretario general de la Consejería de Educación de la Generalitat y subsecretario para las Administraciones Públicas en el Gobierno central.

IGNACIO ESPINOSA. Juez desde los 24 años

Presidente del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja, aseguró que era juez desde los 24 años, es decir, que llevaba más de 32 ejerciendo. Recordó que en 2003 el entonces ministro de Justicia, José María Michavilla (PP), le nombró presidente de la comisión de asistencia de ayuda a las víctimas de delitos. "Por cierto, me alegro que cambien la ley de víctimas de terrorismo", dijo a los senadores. Comentó que había asistido al juicio de Milosevic y que había sido designado observador del referéndum del Sáhara "aunque no se llevó a cabo con el plan Baker".

AUGUSTO MÉNDEZ DE LUGO. Transferencias con Aznar

A diferencia de sus compañeros, no llevaba dos años esperando la llamada del Senado, porque se incorporó recientemente a la carrera de aspirantes. Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, ingresó en la carrera judicial "cuando agonizaba el Régimen" y lleva 38 años de juez. Se declaró "enamorado" de su profesión -"Me llenaba de satisfacción pronunciar 'absuélvase por falta de pruebas", dijo- y recordó que había participado en el traspaso de las competencias de administración de justicia a Andalucía en el primer Gobierno de Aznar.

MANUEL PULIDO. Asesor del Gobierno navarro

Propuesto por Navarra, recordó que había sido letrado del Tribunal Constitucional bajo las presidencias de García Pelayo y Tomás y Valiente. Es, desde hace casi una década, asesor jurídico del presidente de Navarra. Insistió mucho en "la necesidad de recuperar el respeto debido a una institución tan esencial y necesaria en nuestro Estado democratico". Se lo agradeció el portavoz de CiU, que alabó su visión sobre el Tribunal "al que hay que acatar".

LUIS MARTÍN REBOLLO. Elegido por PSOE, PP y regionalistas

Catedrático de Derecho Administrativo en la Universidad de Catabria, recordó su amistad con el segundo presidente del Constitucional, Francisco Tomás y Valiente, asesinado por ETA, y del presidente del Consejo de Garantías Estatutarias. Dijo que estaba cerrando "una síntesis" de la sentencia del Estatuto catalán; que había vivido en seis comunidades diferentes y que había sido propuesto por unamidad con apoyo del PP, el PSOE y el PRC.

JESÚS DELGADO: "No imagino un final mejor"

Catedrático de Derecho Civil, de 66 años, propuesto por Aragón, participó en las jornadas presididas por Josep Tarradellas sobre el primer Estatuto de Cataluña en 1979. Participa desde hace más de 30 años en la obra Elementos de Derecho Civil, que lleva más de 10 volúmenes. "No deseo aumentar en un codo mi estatura... pero no puedo imaginar un final mejor de mi carrera que servir a la sociedad como magistrado del Tribunal Constitucional", dijo.

ANTONI ROVIRA. Asesor de Josep Tarradellas

"Soy el único catedrático de Derecho Constitucional propuesto", advirtió. Propuesto por el Parlamento catalán, recordó que había sido "miembro del Consejo Consultivo de la Generalitat Provisional de Cataluña, del Gobierno en el exilio del presidente Tarradellas" y adjunto al Defensor del Pueblo durante 10 años. Silva (PSOE) dijo que era "un hombre capaz de conseguir que el Constitucional recupere el papel tan importante que siempre le debe corresponder".

ADELA ASÚA. El derecho penal del enemigo

Catedrática de Derecho Penal propuesta por el Parlamento vasco, ejerció como magistrada suplente en la Audiencia Provincial de Bilbao. Tras recordar algunos trabajos sobre delitos desde la perspectiva de género, el tratamiento del terrorismo y el llamado "derecho penal del enemigo". "Su curriculum es imbatible", le dijo Vilajoana (CiU). "Como mujer y como socialista, para mí es muy importante un Constitucional paritario", añadió Carmela Silva.

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Sobre la firma

Natalia Junquera
Reportera de la sección de España desde 2006. Además de reportajes, realiza entrevistas y comenta las redes sociales en Anatomía de Twitter. Especialista en memoria histórica, ha escrito los libros 'Valientes' y 'Vidas Robadas', y la novela 'Recuérdame por qué te quiero'. También es coautora del libro 'Chapapote' sobre el hundimiento del Prestige.

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