Un ADO para la ciencia
En plena y compartida euforia por la clasificación de la selección española de fútbol para la final del Campeonato Mundial, quisiera recordar que el actual florecimiento de los deportistas españoles en todas las modalidades no es fruto del azar sino, a mi juicio, de la política mantenida durante muchos años para ayudar a los mejores deportistas a través del Plan ADO. Para esto no ha faltado dinero, público ni privado, ni ha habido recortes.
En otros campos, como la educación o la investigación, los actuales recortes son mayores que los de ayer; y menores que los de mañana, me temo. Podríamos aprender de la política de la "derrotada" Alemania, que no tocará estos capítulos de gastos, por considerarlos inversión para el futuro. Pero no caerá esa breva y nuestros jóvenes científicos seguirán emigrando sin poder volver.