Cospedal y la huelga

Escucho a Dolores de Cospedal preguntar para quién es la huelga de septiembre. Parece ser de las únicas personas que no esperaban que fuera en esas fechas. No sé si eso le ha borrado la sonrisa de la cara al escucharlo, quizás porque esperaba que esa huelga fuera decisoria para aquellas personas de izquierda que, según las estadísticas, podrían votar en las próximas elecciones a la derecha.

Quizás espera que las asambleas sindicales sean nulas, al igual que en la huelga de no hace muchos días. O que la información que se trasmita sea banal. Pero ni siquiera el Gobierno ha dudado del daño que puede hacerle, pues ya no trasmite el mensaje de respeto a lo que decidan (los sindicatos), sino que más bien se muestra preocupado. Quizás eso ha hecho que el Partido Popular tenga que definirse. Seguro que no acudirán a la huelga de finales de septiembre porque sería ir "contra Europa". ¡Pero si eso es lo que han estado haciendo una y otra vez! Además sería decantarse contra los que realmente nos han llevado a esta crisis y los únicos que, con paro o sin él, siguen teniendo beneficios.

Así pues no se equivoque, señora de Cospedal: los sindicatos van a hacer la huelga contra el Gobierno, sabiendo que si el Gobierno fuera del PP las cosas aún pintarían peor. Y la huelga también será contra los empresarios y banqueros y contra la Europa más recalcitrante.