Emakunde ve difícil prohibir los anuncios de contactos

La prostitución no es ilegal -siempre y cuando sea voluntaria- y prohibir su publicidad por medio de anuncios de contactos en la prensa escrita dificultaría el modo de vida de quienes se dedican a ello. Esa es la razón por la que Emakunde considera difícil la aplicación de sanciones y prohibiciones basadas en la Ley para la Igualdad de Mujeres y Hombres, que afectarían a la prensa escrita que publicita estas actividades.

La directora del Instituto Vasco de la Mujer, María Silvestre, puso ayer sobre la mesa las dificultades para sancionar a los medios escritos que publican anuncios de contactos. "Asumir de entrada que los anuncios son malos es algo de lo que debemos huir", recalcó en una comparecencia parlamentaria. Silvestre censuró la trata de mujeres y las mafias en torno a la prostitución, pero recordó que "prohibir los anuncios condicionaría y mucho la situación de hombres y mujeres que lo hacen de forma voluntaria". La mayoría de los anuncios responden a esta segunda realidad, según Emakunde.

Desde 2006 se han registrado 29 denuncias contra anuncios sexistas

La Defensoría para la Igualdad recomendó en 2008 a cinco periódicos vascos que dejasen de publicar estos anuncios. Las palabras de Silvestre van en contra de las intenciones de la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, quien plantea prohibir esta fuente de ingresos de la prensa escrita.

El debate no resulta nuevo en Euskadi, pero está estancado. En octubre de 2009, la cuestión llegó al Parlamento como una interpelación al lehendakari. "Empezamos a trabajar", respondió Patxi López. Ocho meses después, su Gobierno no ha dado pasos para aclarar los límites legales -la ley prohíbe que los medios "presenten a las personas como inferiores o superiores en dignidad humana en función de su sexo, o como meros objetos sexuales"- , un hecho que le ha valido las críticas de partidos como Aralar.

Los socialistas propondrán en los próximos días la creación de una ponencia parlamentaria que analice la cuestión. Mientras, la fórmula para pasar de puntillas sobre el debate es la autorregulación de los medios, que "no se está haciendo bien", reconoció Silvestre. La responsable de Emakunde pidió que se desarrolle la capacidad sancionadora al respecto.

Las denuncias contra la publicidad sexistas se canalizan a través de Emakunde. Desde 2006 se han denunciado 29 anuncios de este tipo en Euskadi, el último, hace 15 días. La cruzada contra los anuncios de contactos se disparó en 2008, con las recomendaciones de la Defensoría a los medios del Grupo Noticias y de Vocento. Las sanciones son interpuestas por Emakunde cuando son leves, pero las más graves se canalizan a través del Gobierno.

Por otro lado, Silvestre recordó que las mujeres reciben el 94% de las ayudas para el cuidado de menores y el 83% de las destinadas a cuidar a los dependientes. Las medidas de conciliación son "buenas y deseables", pero sus efectos pueden resultar perversos. Este es el caso de las ayudas a la conciliación, hasta ahora más altas para los hombres para atraerlos a esa opción. La diferencia se va a suprimir, ya que el número de hombres que las piden no ha aumentado.