El Tesoro logra colocar 3.000 millones, pero a un coste mayor

La inestabilidad tiende a generar dudas. Y las dudas sobre la capacidad de cumplir con los pagos empujan a los inversores a exigir cada vez más beneficios para prestar su dinero. El Tesoro español fue ayer, una vez más, testigo de este mecanismo. La parte positiva es que colocó 3.067,7 millones de euros en letras a tres y seis meses, con una demanda de los inversores que superó los 7.100 millones. Y logró así superar el objetivo del Gobierno en más de 500. La negativa, que lo ha hecho a un precio sustancialmente superior al de ocasiones anteriores.

"Ayer se rompió la imagen negativa que se había dado la última semana, cuando el Tesoro no logró sus objetivos de colocación. Es un buen dato, que acaba con los rumores negativos que circulaban por el mercado", señala Sara Baliña, de Analistas Financieros.

El rendimiento de las letras a seis meses casi duplica la subasta anterior

La más problemática fue la subasta de las letras a seis meses. Se colocaron 2.005 millones de euros con un rendimiento que casi duplica el anterior: ha pasado del 0,76% ofrecido hace un mes al 1,32% de ayer. Se trata del tipo de interés marginal más alto en una letra a tres meses del último año y medio. Cuando ayer se le preguntó por estos datos, el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, optó por agarrarse al punto de vista que va más en consonancia con sus intereses. "Así se confirma la necesidad de las medidas que hemos tomado", dijo Carlos Ocaña. El número dos de Hacienda se refería al fuerte ajuste -recortes de sueldos de funcionarios, congelación de pensiones, reducción del precio de medicamentos, más trabas a la capacidad de endeudamiento de los Ayuntamientos...- que el Gobierno adoptó la semana pasada con la idea de calmar unos mercados que se están cebando con España.

La subasta a tres meses, en la que se jugaban cantidades más modestas, transcurrió con más tranquilidad. Allí se lograron captar 1.062 millones a un tipo marginal del 0,7%, cuando en abril se había cerrado con un rendimiento del 0,55%. Los inversores se fían más de la capacidad de España de devolver deuda en los plazos más cortos; y por ello castiguen más las emisiones de letras a plazos mayores. De ahí que el Tesoro se viera obligado el pasado 6 de mayo a elevar considerablemente la rentabilidad de los bonos a cinco años al pasar del 2,85% al 3,580%. En julio vencen préstamos por valor de 24.000 millones. "No creemos que haya problemas para este vencimiento", señala Baliña.