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Jack White siempre triunfa

El hombre infalible del rock actual convierte en gran éxito todo lo que toca

El líder de The White Stripes acaba de publicar un álbum con su nuevo proyecto, Dead Weather. Y, como siempre, vuelve a triunfar. "Yo me veo como un director de cine. Todas las películas son como yo, pero no son iguales", dice Jack White desde Tulsa, Oklahoma, donde actúa con su nuevo grupo, Dead Weather. Es su forma de explicar su hiperactividad. White tiene 35 años y ha publicado un disco al año con alguna de sus tres bandas (The White Stripes, The Raconteurs y Dead Weather) desde 1999. La excepción fue 2004 cuando produjo Van lear rose, de Loretta Lynn, una olvidada cantante de 75 años que terminó ganando el Grammy a mejor álbum country. Hay más: en 2008 interpretó a medias con Alicia Keys el tema principal de Quantum of solace, el último filme de la saga Bond hasta la fecha.

"Yo me veo como un director de cine", recuerda el músico estadounidense

No es un músico pop. Abomina de lo digital y de Internet ("Es un mundo lleno de cobardes que se amparan en el anonimato para difamar", opina). Su primer grupo, The White Stripes, es un dúo de blues troglodita con su ex-mujer Meg, a la batería. Vendió más de dos millones de copias. Elephant, su álbum de 2003, ganó cuatro grammys y es ya un clásico. Su éxito le enemistó con los músicos de su ciudad, Detroit. "Son siempre las mismas caras. Cuando White Stripes explotaron a nivel mundial, los demás se habían quedado en su pequeño mundo, y se me hacia difícil moverme con naturalidad. Tenía que salir de allí".

Se mudó a Nashville en 2005, con su segunda esposa, la supermodelo Karen Elson, a la que le ha producido un disco que se editará a finales de mayo. "Nunca había tocado la guitarra para mí. No sabía que podía tocar. En cuanto la oí fuimos al estudio. Es muy buena componiendo. Debería haberlo hecho hace 10 años". En esa ciudad de Tenessee fundó The Raconteurs, un proyecto a medias con su amigo Brendan Benson. Publicaron su primer álbum, Broken toy soldiers, en 2006, de una forma tímida. Pero uno de sus temas,Steady as she goes, se convirtió en un éxito. De repente eran el grupo de moda y publicaban un segundo álbum, Consolers of the lonely, en parte porque The White Stripes quedaron en barbecho cuando Meg White se vio obligada a retirarse tras sufrir varios ataques de ansiedad.

En la gira de Raconteurs sus teloneros eran The Kills, un estimable dúo británico de rock. White hizo buenas migas con su cantante, la sensual Alison Mosshart. "Es una vocalista impresionante. Tiene una voz muy potente", dice. De ahí salió Dead Weather. "Al final de la gira, Alison tenía un día libre antes de volver a Londres. Le dije que se viniera a Nashville. Yo acababa de construir mi estudio. No teníamos la más mínima idea de que íbamos a hacer. Y ese primer día grabamos cinco canciones. Pronto quedó claro que aquello iba a ser un álbum".

Huelga decir que, como todo lo que toca este hombre aquel disco, Horehound, rock setentero a lo Led Zeppelin, se convirtió en un éxito. Mosshart es la principal cantante, él se reserva la batería. "De crío todo lo que quería hacer era tocar tambores. Mi padre era un gran fan de los baterías y tocábamos juntos. Empecé a cantar y a tocar la guitarra simplemente porque a mi alrededor no había nadie que lo hiciera".

Y ahora diez meses después de aquello, se edita un segundo álbum, Sea of cowards, impresionante tratado de rock setentero. "Sí, ya sé que es una locura editar dos discos en tan poco tiempo. Pero que quieres que le haga. Las canciones venían y venían y no podíamos parar. Además, todos estamos en otras cosas y este es el último verano que tenemos libre en mucho tiempo. Podíamos publicarlo ahora e irnos de gira o esperar dos años. Pues qué diablos, lo sacamos ya".

Jack White durante la presentación en Toronto de un filme sobre The White Stripes, en 2009.
Jack White durante la presentación en Toronto de un filme sobre The White Stripes, en 2009.REUTERS

HISTORIA A TRES BANDAS DEL ARTISTA QUE SIEMPRE CAE DE PIE

Así empezó todo

- The White Stripes. Jack y Meg White llevan desde 1997 haciendo blues y garage rock tan básico que, al principio sólo usaban guitarra, batería y voz. Su último disco, Icky thump, se publicó en 2007. Suspendieron la gira por problemas de ansiedad de Meg y desde entonces su futuro es incierto. "De momento no hay planes para grabar, pero todo puede cambiar", dice ambiguo, White, sobre el porvenir de la banda.

Con los amigotes

- The Raconteurs. Con ellos White ha grabado dos discos desarrollado un estilo más relajado, entre el rock y el pop añejo. El grupo lo completan su viejo amigo el cantautor de Michigan Brendan Benson y dos componentes de The Greenhornes, una banda de la que White es fan. "Es un grupo más de Brendan que mío. Es fácil trabajar con él. Ahora está ocupado con sus proyectos. No hay nada a la vista", explica White.

La furia rockera

- Dead Weather. Es un híbrido de sus dos anteriores proyectos. Se trata de un grupo con chica, (la vocalista es Alison Mosshart, de The Kills) y reunión de amigos (el guitarrista es el mismo que en The Raconteurs, y el bajista Dean Fertita, es vecino de White). Su primer disco se publicó el año pasado. El segundo, Sea of cowards, no ha tardado mucho. Llega el 11 de mayo.

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