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Entrevista:CARLOS BERZOSA

"Esto parece una caza de brujas"

Siete años de rector y cuatro semanas en la diana del PP madrileño. Carlos Berzosa (Madrid, 1945) piensa agotar el año que le queda al frente de la Universidad Complutense, aunque el vicepresidente Ignacio González le considere "inhabilitado" por haber acogido un sonoro acto de apoyo al juez Garzón el martes. Este catedrático de Estructura Económica volvería a hacerlo, aunque quizá no intervendría. El viernes, en su despacho, analizaba una espiral iniciada con la agresión de alumnos que pedían colegios mayores segregados por sexos y sin goteras. Una espiral que, esa mañana, llevaba al Consejo de Gobierno de la Complutense a pedir "el máximo respeto" a la autonomía universitaria frente a las injerencias del Gobierno de Esperanza Aguirre.

"No dimito, pero si las cosas se ponen mal tendré que pensarlo"
Aguirre no respeta la autonomía universitaria, según Berzosa
"A posteriori me pensaría más autorizar el acto de Garzón"
"De repente yo aparezco como un diablo perverso de la izquierda radical"
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Pregunta. ¿Por qué la ha tomado el PP con usted?

Respuesta. Soy el primer sorprendido. Siempre he tenido relaciones muy cordiales con la presidenta. Cuando íbamos a actos siempre me decía al acabar mi discurso "muy bien, rector, como siempre". Parece que he pasado de tener sentido institucional a ser una persona que ha perdido la cabeza, y yo no he hecho nada. Cuando se desencadena el conflicto de los colegios mayores, empiezan a decir que no hemos gastado bien el dinero que nos han dado. Luego viene el diputado del PP con lo de [que hemos gastado el dinero en] los pisos de lujo, que tuvimos que desmentir. Después, lo de Garzón. Han debido de decir "barra libre" con el rector Berzosa.

P. ¿Se siente víctima de una cacería política?

R. Me he convertido en un rector incómodo para la Comunidad de Madrid y han decidido intentar ir a por mí a ver si así consiguen un rector más de su cuerda en la Complutense. Creen que debo dejar el puesto. He hecho siete años de rectorado que la comunidad universitaria ha valorado mucho y de repente quieren desprestigiar todo y yo aparezco como un diablo perverso de la izquierda radical yendo contra la Constitución cuando fui de los que votó a favor. Me he convertido en un objeto a golpear y me gustaría saber por qué. Parece una caza de brujas.

P. ¿A qué se debe?

R. Es muy difícil saberlo. Habría que preguntárselo a ellos. Me queda un año de mandato y quieren posicionarse en la Complutense; soy una persona de izquierdas y quieren quitar a los discrepantes... Quizás han visto una posibilidad de debilitarme como presidente de la CRUMA (conferencia de rectores madrileños), como persona que reivindica que le paguen los contratos programa que deben a la univeRsidad... Como yo denuncio todo esto, eso hace que digan "ahora a este lo vamos a debilitar para que no tenga fuerza para negociar". Si te tienen sujeto a critica todos los días y tratan de desestabilizarte, de desprestigiarte ante la comunidad universitaria, eso perjudica a mi trabajo.

P. ¿Lo han conseguido?

R. No. Estoy sufriendo una situación muy injusta, pero tengo fortaleza y muchos apoyos. Me parece muy reconfortante el comunicado del Consejo de Gobierno de la universidad aprobado por unanimidad

[para exigir respeto a la autonomía universitaria y al rector]. Me siento protegido por la comunidad universitaria que es la que me elige y tiene todo el derecho del mundo a criticarme. No podemos permitir que se ponga en cuestión la autonomía univesitaria, que es un derecho constitucional.

P. ¿Volvería a autorizar el acto de homenaje a Garzón?

R. A posteriori, sabiendo lo que ha pasado, me lo pensaría más, pero en principio sí, porque me lo pidieron los dos sindicatos mayoritarios del país. Fue un acto pacífico. Asistí porque me lo pidieron los sindicatos, que eran los organizadores.

P. ¿Se arrepiente de haber intervenido?

R. Visto lo visto, a lo mejor sí, pero no podía imaginar que un acto de ese tipo cree esta tensión. Soy el primer sorprendido con lo que se ha armado. Si lo llego a saber, me habría mantenido al margen. Me limité a darles la bienvenida.

P. El vicepresidente González considera que eso "le inhabilita para seguir siendo rector".

R. Yo, como ciudadano, sí puedo decir que él debe dimitir, pero él no puede decirlo de mí, porque no es miembro de la comunidad universitaria. Estamos en una universidad que es autónoma por un derecho constitucional. Todo el mundo puede opinar lo que quiera, pero que lo diga un vicepresidente es una injerencia bastante fuerte del poder político en el mundo universitario. No me imaginaba yo que tendríamos que defender la autonomía universitaria como lo estamos haciendo ahora mismo.

P. ¿Echa en falta el respaldo de otras universidades?

R. Recibí el de la CRUE (conferencia estatal de rectores) cuando sufrí la agresión de los estudiantes. Ahora no he recibido nada de ellos.

P. ¿Le sorprende?

R. No. A lo mejor están sorprendidos y perplejos.

P. O tienen miedo.

R. No creo. La autonomía universitaria nos resguarda frente al poder político. Aunque como dependemos mucho de él para la financiación y la aprobación de las titulaciones, siempre tienes que intentar llevarte bien. Si el poder político quiere, puede ahogarte financieramente, te puede hacer la vida imposible.

P. ¿Ha pensado en dimitir?

R. No es el momento, y menos si me lo piden de la forma en que me lo piden. Ahora, si observo que las cosas se ponen mal y que eso puede perjudicar a la universidad, tendré que pensarlo, porque no quiero hacer daño a la institución por un problema con la Comunidad. La universidad está por encima de los intereses de Carlos Berzosa como rector.

P. Por si fuera poco, el jueves, los "antisistema" reventaron un acto en la Complutense

R. Estaba organizado por la Comunidad de Madrid. El enfrentamiento era con la Dirección General del Menor, no con la Complutense. No es admisible que Granados diga que esto es resultado de las tensiones que hay en nuestra universidad. Funciona pacíficamente, la gente esta tranquila y calmada.

P. ¿Dónde están los estudiantes cuando el rector denuncia ataques a la autonomía universitaria ?

R. Muchos me han dicho que me apoyan, pero no quiero tensar, sino tranquilizar. No me siento abandonado. Las cosas han adquirido un nivel de termómetro excesivo y lo que hay que hacer es enfriarlas, llevarlas por un cauce de diálogo. Yo no tengo interés en enfrentarme con la Comunidad.

P. O sea, que dos no pelean si uno no quiere.

R. Sí, pero tampoco quiero recibir bofetadas nada más. Me voy a defender con las armas que tengo, que son la razón, la fuerza moral y las declaraciones institucionales claras de la universidad. No voy a poner la mejilla para que me golpeen, pero tampoco estoy dispuesto a salir a las provocaciones.

P. Su calma no evita vapuleos.

R. No me dejo vapulear. Defiendo muy bien mis derechos y los de la universidad. A mí no me callan.

P. Le han convertido en el pim pam pum.

R. Sí, pero no me dejo comer el terreno. Si vienen con el batallón, es David contra Goliat. Pero bueno, también David ganó a Goliat.

Yo confío en la fuerza de la razón universitaria.

P. ¿También frente a Aguirre?

R. Yo no estoy en lucha, ella es la que ha desencadenado la batalla contra mí en un grado máximo.

P. ¿Teme que le castiguen con recortes de fondos?

R. Sí, porque viendo cómo se las gastan... Pero espero que no hagan una cosa semejante.

El rector de la Universidad Complutense, Carlos Berzosa, en su despacho, el pasado viernes.
El rector de la Universidad Complutense, Carlos Berzosa, en su despacho, el pasado viernes.GORKA LEJARCEGI

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