"Nuestro objetivo no es un pelotazo, sino sacar adelante a los ganaderos"

Tras un inicio un poco convulso e interpretaciones varias, el paso del tiempo le fue otorgando cuerpo y ahora está a punto de arrancar el proyecto de comercialización de leche gallega con mayor rentabilidad para sus productores en origen. Se trata de Alimentos Lácteos, SA, la empresa de base cooperativa que se hizo con las instalaciones que Leche Pascual estaba dispuesta a cerrar en Outeiro de Rei. Hay casi tantos precedentes como fracasos de apuestas similares, pero su gerente, Roberto Casas Abeijón (Santiago, 1972), asume el reto convencido de que serán capaces de otorgar continuidad a una de las últimas oportunidades que tiene el sector productivo gallego para eliminar intermediarios y encontrar una salida a la peor crisis de su historia.

"Tenemos una ilusión tremenda en el lanzamiento de la marca propia"

"Si todo va como deseamos, en un año necesitaremos mayores cantidades"

Pregunta. En este proceso tuvieron que salvar muchas complicaciones.

Respuesta. Las ha tenido y las sigue teniendo, porque es un proceso que todavía está en su fase inicial. Hemos conseguido tener prácticamente lista la fábrica y ahora nos viene todo el trabajo de hacer mercado. Estamos muy satisfechos con lo que hemos hecho, pero lo que nos queda es aun más importante.

R. Iban a sacar producto el día 5, pero se retrasa.

R. Se debe a un problema interno de Pascual, que nos ha pedido que retrasáramos el inicio de la fabricación que tenemos para ellos. Aun así, esperamos envasar la próxima semana y, desde luego, el día 20 de abril daremos inicio a nuestra elaboración con marcas blancas y una marca propia que será nuestro producto estrella.

P. ¿El lanzamiento al mercado de la marca propia es su gran objetivo?

R. En realidad se trata de un subproyecto en el que tenemos una ilusión tremenda. Será una leche que defenderá claramente nuestros valores y va a implicar que quien la compre estará ayudando indirectamente al ganadero gallego. Queremos salirnos un poco del esquema de marcas blancas, aun reconociendo que están ahí y tienes que convivir con ese mercado, pero nos esforzaremos en un producto elaborado íntegramente con leche gallega y con gran valor diferencial.

P. Crisis económica, crisis en el sector..., ¿es momento para arrancar con el negocio?

R. Yo añadiría que además es primavera, que es un momento en el que suele subir la producción y eso conlleva una bajada de precios: realmente, el momento no es el idóneo. De todas formas, nuestro objetivo no es un pelotazo, sino sacar adelante una iniciativa que surge del campo y para el campo, que tiene mucho calado y que constituye una apuesta a medio plazo.

P. ¿La especulación forma parte de sus criterios empresariales?

R. Por supuesto que no, pero tampoco somos una ONG. Constituimos un instrumento que tiene el ganadero para colocar la leche de su propiedad con el mínimo coste posible y a esa leche darle más precio en origen.

P. Leyma-Ram, con objetivos parecidos, no sobrevivió...

R. Hay que aprender de las experiencias fallidas del pasado.

R. ¿Cómo repercutirá en el sector la compra de Puleva por la francesa Lactalis?

R. Lo vemos con preocupación. En pocos años se liberalizará el sistema de cuotas, habrá libre circulación de leche y sin cortapisas de producción. Lógicamente, si una empresa francesa tiene una gran representación industrial en este país es normal que quiera llevar materia prima a donde la va a producir. Esto hace que en España y en Galicia nos veamos con una situación de futuro bastante complicada.

P. La gran distribución también la controlan empresas francesas. ¿Encuentran problemas para colocar sus productos?

R. Creo que en ese sentido no habrá tanto problema. Es cierto que buena parte de la gran distribución es de capital francés, pero lo que buscan es un producto competitivo. Al final son empresas que buscan rentabilizar su espacio y, a partir de ahí, creo que hay espacio para todos.

P. Comenzarán con ocho cooperativas y unos 500.000 litros diarios para transformar, ¿es suficiente?

R. Estamos abiertos a la integración de más cooperativas, aunque para empezar es suficiente. Lógicamente, si todo discurre como deseamos, en seis meses o un año necesitaremos mayores cantidades.

P. Recibieron críticas por ser Alimentos Lácteos una apuesta en la sombra de la Xunta y, en particular, de Medio Rural.

R. Es algo que hemos vivido con cierta perplejidad. Que uno o dos presidentes sean concejales del PP no da lugar a ciertas interpretaciones. Con todo, lo hemos tomado con absoluta tranquilidad y creemos en nuestro proyecto independientemente de las etiquetas políticas que nos hayan colocado. Tenemos muy claro que el funcionamiento de la sociedad tiene que ser apolítico y transparente y siempre para mejorar las condiciones de los ganaderos gallegos.