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PSE y PNV consuman el reparto de los órganos de Vital y marginan al PP

Los nacionalistas logran la mayoría en el Consejo de Administración por uno

Pedro Gorospe

La exclusión del PP de los órganos de control de Caja Vital ya es un hecho. Hasta ayer era sólo un acuerdo de PSE y PNV, pero la asamblea extraordinaria celebrada en la tarde de ayer los sustituyó definitivamente del Consejo de Administración y de la Comisión de Control, entre las protestas de los populares. Para hoy está prevista la designación de los miembros de la Comisión Ejecutiva.

Impulsados por las plataformas Bertatik (PNV) y por la Plataforma de la Pluralidad (PSE) los nuevos consejeros fueron respaldados con 46 votos de los 91 presentes, según precisó el interventor y uno de los que abandonan la comisión de control, Miguel Garnica (PP). La plataforma Vital Sí, que auspiciaban los populares sólo recibió 18 votos y los miembros de la izquierda abertzale se abstuvieron. El resto fueron blancos y uno nulo.

Los socialistas tienen la mayoría en la Comisión de Control de Vital

Al final no hubo sorpresas en el Día D. Pese al reciente escándalo que aqueja al PNV alavés y que ha llevado a los tribunales entre otros a uno de los miembros de la Comisión Ejecutiva y del Consejo de Administración, Alfredo de Miguel, que ha dimitido al estar implicado en un presunto caso de corrupción, -su puesto se cubrirá en una asamblea posiblemente en abril-, nacionalistas y socialistas votaron a bloque.

El consejo de administración tiene desde ayer siete miembros de la plataforma impulsada por el PSE, -entre ellos el presidente del Colegio de Abogados de Álava, Javier Martínez de San Vicente- y el PNV, otros siete. Pero tendrá la mayoría cuando elijan al sucesor de De Miguel, que será Ana Aguirre. Es decir, el PNV controlará ese órgano. El consejero número 16 será el de ELA, Enrique Ortiz de Urbina.

En el caso de la Comisión de Control la mayoría está en manos de los socialistas con cuatro miembros, frente a tres impulsados por el PNV y el de CC OO. "El PSE ya no tiene nada que decir en la posible fusión de las cajas, está en manos del PNV en las tres cajas", criticó ayer Miguel Garnica, recordando que ha perdido la mayoría en el Consejo. "No es un hecho trascendente" replicaron desde la plataforma socialista. "Hay un acuerdo para cuatro años con el PNV y eso es lo sustancial", aseguraron.

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La asamblea no fue especialmente larga. Para las 21 horas la mayoría de los nuevos miembros había abandonado el edificio con forma de cromosoma ubicado en las orillas de los humedales de Salburua.

Todavía resonaban los ecos de la asamblea del lunes, cuando el presidente de la entidad, Gregorio Rojo, pidió que se "despolitizaran" las cajas, para lograr unas entidades más efectivas y solventes.

"Una cosa es presencia institucional y otra el control político que se ha fraguado hoy aquí", criticó Garnica dentro y fuera de la asamblea. "Es un objetivo no cumplido" dijo, asumiendo que ya se había pasado el tiempo de la batalla y que habían salido perdedores de esta.

Ganaron en los juzgados al lograr en primera instancia que se cuestionara la permanencia de Gregorio Rojo en la presidencia, pero ya no tienen ninguna presencia en los órganos de Vital. "Dentro de dos años tocan elecciones de nuevo y ya veremos entonces", dejó caer Garnica.

Políticos y ciudadanos pusieron fin ayer a un proceso complicado al incorporarse a la Asamblea el 50% de sus miembros. A los 22 que fueron elegidos en marzo de 2008 se sumaron los 28 elegidos de entre las instituciones y empleados. Estos últimos han sido los más criticados al proceder del acuerdo entre nacionalistas y socialistas, y que ha facilitado la entrada a numerosos pesos pesados del PNV y del PSE.

Los ex consejeros vascos Javier Balza y Ana Aguirre conversan durante la asamblea general de ayer de Caja Vital.
Los ex consejeros vascos Javier Balza y Ana Aguirre conversan durante la asamblea general de ayer de Caja Vital.PRADIP J. PHANSE

El joven de la sudadera

El presidente del PNV de Álava, Iñaki Gerenabarrena, llegó a la asamblea extraordinaria de Vital, entidad de la que es vicepresidente, como si fuera a una excursión montañera. Sudadera azul y pantalón varias tallas más grande. Una imagen que chocaba con la del resto de sus compañeros de responsabilidades en el órgano central de la entidad. Junto a él estarán por el PNV en el consejo de administración Hernando Lacalle, Fernando Velasco, la ex consejera Ana Agirre, Izaskun Garaigordobil, José Luis López Iturritxa y Miren Saratxaga.

Por la plataforma socialista figuran en el consejo Virgilio Bermejo, el alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, el presidente Gregorio Rojo, Elena Girbau, Juan Antonio Sánchez Corchero, Miguel Gutierrez, y Javier San Vicente. Por ELA, Enrique Ortiz de Urbina.

En la Comisión de Control, por el PSE están Marta Buesa, Cristina González, Blanca de la Peña, y el ex campeón del mundo de marathón, Martin Fiz. Por el PNV, José Javier Carro, Alvaro Iturritxa y Nerea Sangroniz. Por el sindicato CCOO, Juan Antonio Ordoñana.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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