CiU, el PP y ERC exigen que se cambien los accesos del metro y más seguridad

Cambiar los tornos bajos y sustituirlos por puertas altas de cristal en todas las estaciones, validar el ticket en la salida, utilizar los sistemas de videovigilancia que ya tienen muchas estaciones, poner cámaras de control en los accesos y más seguridad en forma de patrullas. Estas son algunas de las reclamaciones que de forma reiterada han presentado los partidos de la oposición tanto en el Ayuntamiento de Barcelona como en el Consejo de Administración de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB). "Estamos cansados de pedir las cifras del fraude y exigir que se ponga remedio a unas conductas cada vez más extendidas, hasta tal punto que muchos consideran normal colarse en el metro", explica Eduard Freixedas, concejal de CiU. La multa de 50 euros al que viaja sin billete es, en su opinión, insignificante "por puras probabilidades de ser descubierto y multado, ya que apenas hay inspectores".

La sensación del edil nacionalista de que ni el Consistorio ni TMB actúan con contudencia es plenamente compartida por el PP y ERC, aunque con recetas distintas. "Si se ponen cámaras en los accesos, se podrá ver a los que se cuelan y exigirles que paguen", afirma Àngels Estellers, edil del PP.

El presidente del grupo de Esquerra Republicana, Jordi Portabella, cree que parte del fraude se evitaría generalizando las puertas altas en todas las estaciones y obligando a validar para salir. "No puede calar la idea de que si no pagas no pasa nada", añade.

En el caso del fraude del tranvía, Josep Rull, diputado de CiU, apunta que uno de los problemas es que los interventores tienen miedo de pedir el billete si no van acompañados de guardias de seguridad. Opina que la situación de Renfe es de descontrol total, sobre todo en los últimos dos años, tras eliminarse los revisores.