La clase que acabó con los niños bajo el pupitre

Hasta 19 niños de cinco años y una profesora salieron ayer ilesos del aula del colegio público Pereanton de Granollers (Vallès Oriental) sobre la que se desplomó la estructura y las placas del falso techo. Fue la maestra la que, al oír que el techo crujía, ordenó a los niños a protegerse bajo los pupitres. Un segundo más tarde, las placas empezaron a caer hasta que todo el entramado metálico se vino abajo. Sólo un niño sufrió un leve golpe en la frente, explicó la concejal de Educación del Granollers, Pietat Sanjuán. El falso techo fue instalado hace sólo tres años. El Ayuntamiento de Granollers ha abierto un expediente informativo. La empresa pública GISA, responsable del proyecto, y el Departamento de Educación explicaron que sus técnicos estudian el suceso.

Tras el desplome del techo, la profesora organizó la evacuación de la clase como mejor pudo: diciendo a los niños que todo era un juego y que había llegado la hora de salir del aula.

La escuela mantuvo la normalidad de las clases pese al incidente, aunque el aula afectada se mantiene cerrada y se están limpiando los escombros. Igualmente, de forma preventiva, la clase contigua también ha sido clausurada, ya que cuenta con la misma estructura del techo. La escuela se halla en un edificio antiguo con techos altos, pero en 2007 se realizaron unos trabajos para colocar el falso techo. Las obras corrieron a cargo de la empresa pública Gestió d'Infraestructures S.A. (GISA). De hecho, técnicos de esta empresa, así como un arquitecto del Departamento de Educación, se trasladaron hasta la escuela para evaluar los daños y averiguar el motivo del desprendimiento.

Por su parte, el Ayuntamiento de Granollers ha decidido abrir un expediente informativo y ha anunciado que exigirán "responsabilidades a quien haga falta".