El relato de Sandra

"Se oyeron unos disparos. Fui corriendo hasta la ventana y vi salir a mi padre del coche. Sentí alivio cuando le vi salir[...], pero mi expresión cambió cuando le vi ensangrentado. Me miró; yo le miré. Dio unos pasos y cayó al suelo. Salí corriendo a la calle y mi madre estaba allí abajo. Estuvimos con él, dándole ánimos, consolándole, diciéndole que iba a salir adelante. Miré el coche y comprobé que le dieron cinco tiros, no tres como habíamos escuchado. Pedí una ambulancia a gritos. La gente no se acercaba; no nos ayudaron nada. No nos trajeron ni una simple sábana para tapar a mi padre. Yo le cubrí el cuerpo con una bata que tenía puesta. Intenté tapar las heridas, pero no las veía; sólo había sangre. A los 12 minutos llegó la ambulancia".

El 'lehendakari' encabeza hoy el homenaje a Carrasco en Mondragón

Así narró Sandra Carrasco en las Juntas Generales de Guipúzcoa los últimos momentos de la vida de su padre Isaías, herido de muerte tras recibir los disparos de un pistolero de ETA. Su testimonio figura recogido íntegramente en el libro Hablan las víctimas. Una visión íntima, publicado por el Legislativo foral a mediados del año pasado y que ya ha sido presentado en Barcelona y en Mérida (Badajoz).

La muerte de Isaías Carrasco, hace hoy dos años, será recordada este mediodía en Mondragón por sus familiares, amigos, allegados y compañeros de partido. Una ofrenda floral en la calle Navas de Tolosa, justo en el lugar donde fue asesinado le rendirá homenaje, la calle que sus deudos queiren que algún día lleve el nombre del ex edil. El acto ha sido convocado por los socialistas guipuzcoanos y lo encabezará el propio lehendakari, Patxi López.

Asistirán Marian Romero, la viuda, y sus hijos Sandra, de 22 años; Ainara, de 19, y el pequeño Adei, que ahora tiene seis años. "Echan mucho en falta a Isaías", afirma Rafaela Romero, presidenta de las Juntas, "sobre todo Marian, porque tiene que hacerle entender a su hijo más pequeño lo que es incomprensible".