Tarradellas aplaza la creación del organismo consultivo de la Generalidad
En contra de todas las previsiones, no se constituyó anteanoche, en Perpignan (Francia), el organismo consultivo de la Generalidad, mientras aparecían serias divergencias entre Josep Tarradellas, presidente de la Generalidad en el exilio, y los partidos y organizaciones nacionalistas y de extrema izquierda, que hasta ahora le habían defendido enérgicamente. Ello es considerado como un nuevo intento de Tarradellas de aproximarse a los partidos de centro derecha.Este cambio radical de actitud por parte de Tarradellas sería debido, esencialmente, a la visita que el día anterior le efectuó el secretario general adjunto de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC), Miguel Roca. El secretario general de CDC es Jordi Pujol.
En todo caso, EL PAIS supo que varios dirigentes de los veintidós partidos reunidos en Perpignan para constituir el organismo consultivo no pudieron, en casos concretos, evitar el exteriorizar su descontento ante la decisión de Tarradellas de aplazar su constitución. Así, Reforma Social Catalana expresó su deseo de abandonar la reunión y Solidaritat d'Obrers de Catalunya afirmó que quizá no volvería a tomar parte en un encuentro de este carácter.
Pero los mayores problemas de conciencia fueron los que afectaron a Joan Cornudella y Heribert Barrera, líderes de Front Nacional de Catalunya y de Esquerra Republicana, respectivamente. A ambos, Tarradellas les presionó para convertir la reunión constitutiva del nuevo organismo en «un debate sobre la situación política general». Los dos dirigentes no pudieron evitar, en privado, por vez primera, expresar su profundo desengaño ante tan incomprensible cambio de actitud, ya que el encuentro tenía la finalidad específica de crear el nuevo órgano unitario. Cornudella, dirigente nacionalista catalán que cuenta con un gran prestigio, incluso llegó a manifestar que «parece que hemos venido a Perpignan a tomar café».
El resultado, en efecto, no fue diferente si la finalidad del viaje hubiese sido la mencionada por Cornudella, ya que no solamente ha sido aplazada sine die la constitución del organismo consultivo, sino que incluso no se llegó a crear una comisión entre partidos encargada de tal cometido.
En cambio, Tarradellas anunció que él, en base a su criterio personal, designaría una comisión y también un representante personal suyo. Ambas designaciones tendrían la finalidad -ahora ya hipotética- de crear el desconcertante organismo consultivo.
