"El PP sabrá por qué se suma al BNG en las cajas"

Guillerme Vázquez (Pontevedra, 1952) cumple nueve meses al frente del Bloque Nacionalista Galego. Se enorgullece de que la organización "llevase la iniciativa en el debate sobre el futuro del ahorro de los gallegos".

Pregunta. Haga un balance del primer año de Feijóo.

Respuesta. Cualquier observador imparcial se da cuenta de que ha sido un año perdido. La Xunta no ha puesto encima de la mesa ninguna medida para paliar la crisis económica. Se limita a culpabilizar al Gobierno central. No se ha vuelto a saber de su plan de choque. Feijóo se ha limitado a descalificar y derrocar lo hecho por el bipartito. Y la gran novedad ha sido el ataque a la lengua gallega.

P. ¿Qué responsabilidad tiene la oposición en que la crisis no esté en primera línea del debate político gallego?

"La línea del BNG sobre las cajas fue aprobada por unanimidad"

"El recurso o las medidas anticrisis no favorecen nuestra relación con el PSOE"

R. No será porque el BNG no se haya pronunciado. Otra cosa es si nuestro mensaje es amplificado o queda opacado por razones que se me escapan. El Bloque ha definido como objetivo básico atacar la política ausente del PP sobre la crisis y el giro a la derecha del Gobierno central.

P. Tras la ruptura de la negociación entre Xunta y Estado sobre las cajas, ¿cuál es la posición nacionalista?

R. La única posición coherente, mantenida desde el principio. No solamente tuvimos las iniciativas que han conducido a la situación actual, sino que también elaboramos la ley y el manifiesto [Galicia ten dereito] del 5 de febrero. Pero desde el momento en que empezaron estas negociaciones dijimos que no nos parecía la manera de arreglarlo. Aunque si ha decidido negociar, será su responsabilidad. Nosotros no vamos a aceptar un recorte sustancial de la ley en lo referido al futuro de las cajas y, por lo tanto, de nuestro ahorro.

P. ¿La Xunta ha consultado con el Bloque, su aliado, durante la negociación?

R. La negociación la hace el Gobierno, no las fuerzas políticas, y por lo tanto la responsabilidad de la vía elegida y del método es del Gobierno. No tiene nada que consultar, ni el BNG tiene nada que aportar.

P. ¿Dónde se encuentra el punto en el que el BNG se separaría del PP en las cajas?

R. Impulsamos la ley y decimos que esa ley es constitucional y que debe permitirnos la orientación del ahorro de los gallegos. Ésa es la base. Y la línea roja se sitúa en cualquier marcha atrás de esa decisión.

P. ¿La organización todavía barajan la movilización social?

R. Madrid ha recurrido la ley, lo que no ha hecho en otras comunidades donde sí permite fusión de cajas. Nuestro diagnóstico considera político y no técnico el recurso planteado por el Gobierno y, así, la respuesta de la sociedad gallega debe ser en términos políticos.

P. ¿Otra manifestación?

R. No solamente. Movilización social también son proclamas de los concellos, de las diputaciones, de la universidad... de todos los sectores que representan a este país y que son este país. La sociedad gallega debe corresponsabilizarse de su futuro. No será garantía para que Madrid ceda, pero sino visualiza a un país que dice no, tampoco lo hará.

P. ¿Le parece sincero este galleguismo financiero del PP?

R. Nosotros iniciamos el debate. Feijóo permaneció pasivo durante mucho tiempo y el Partido Socialista hacía exactamente lo mismo. En un momento dado, y ellos sabrán por qué, el PP decide sumarse a las tesis del Bloque. A partir de ahí, no juzgo intenciones. Es verdad que nosotros lo hacemos porque defendemos el país, con todos los riesgos políticos, y los demás no sé exactamente porque lo hacen.

P. ¿Qué opina significativas voces nacionalistas que, como Beiras o Xavier Vence, cuestionan la fusión de las cajas?

R. El Bloque es plural, y hay obviamente voces diversas. En cualquier caso, la línea la marca la Executiva y el Consello Nacional y ambos han aprobado unánimemente la posición del BNG.

P. Las movilizaciones a favor del gallego han sido un éxito de convocatoria. La Xunta ha comenzado a matizar sus posiciones. ¿Qué exige el BNG?

R. Que retire el decreto. El PP ya no utiliza el tono de hace unos meses, pero a ver en qué concreta esa marcha atrás. Ahora bien, si el anterior decreto era democrático e incluso lo apoyó el PP, ¿a qué viene modificarlo? Quien tomó medidas para reducir el gallego en la enseñanza fue el PP. No sé qué acuerdo puede haber sin volver al decreto anterior. No se va a solucionar maquillando una intención evidente: atacar el gallego.

P. ¿No temen que la rectificación de la Xunta desmovilice?

R. Procuramos no ser un partido saltimbanqui. Así que esperaremos a ver si la Xunta mueve sus planteamientos y en qué lo hace. De todas maneras, la mayoría de la sociedad que se movilizó en defensa del idioma sabrá juzgar las intenciones del PP. No sé si habrá quien tenga la tentación de ayudarles a convencer a la sociedad. Nosotros no.

P. La oposición frontal al PP en el tema lingüístico contrasta con la sintonía en las cajas. ¿Puede eso confundir al ciudadano?

R. El BNG es una fuerza política que se mueve con total independencia y nadie duda de que somos la oposición al PP en este momento y en este país, pero lo que no vamos es a evitar una coincidencia puntual por el qué dirán. Además, en las cajas la iniciativa ha sido nuestra y quien se suma a las tesis del BNG es el PP. Y ojalá la derecha se sumase también a nuestros planteamientos lingüísticos, ojalá.

P. ¿Qué suponen las modificaciones a la Lei do Solo?

R. Deberíamos establecer normas que den estabilidad jurídica, que respeten el territorio. Pero no hay leyes del suelo asépticas. Y es difícil coincidir con la filosofía liberalizadora del PP.

P. ¿Y el PSdeG pacta con la Xunta por celos del Bloque?

R. No juzgo intenciones, pero es cierto que hay división en el grupo socialista, explicitada.

P. Hasta el punto de que Touriño no asistió a la votación.

R. También, pero no se trata de un caso individual.

P. La distancia entre el BNG y los socialistas, ¿es más grande que nunca?

R. No debemos ocultar que a nivel estatal, la relación no se ve favorecida por el recurso contra la Lei de Caixas ni por las fórmulas contra la crisis, que inciden en las políticas que nos han llevado a esta situación. Lo que no quita que coincidamos en lo que haya que coincidir y no en lo que no. Somos fuerzas políticas diferentes con planteamientos diferentes. Debemos empezar a entenderlo, sino seríamos fuerzas políticas iguales.

P. ¿Cómo afronta el BNG las municipales del año que viene?

R. Hay una buena percepción social de la actividad del BNG. Las últimas encuestas apuntan a la recuperación de la confianza de los ciudadanos en el Bloque. Pero aún faltan 15 meses.

P. ¿Renovarán los candidatos de las ciudades?

R. Eso lo decidirán las asambleas comarcales. El Consello Nacional las ratifica, pero respeta la decisión de la militancia.

P. Hay voces internas que cuestionan en público sus colaboraciones en La Voz de Galicia, después de que algunos dirigentes nacionalistas acusasen al periódico de tratamiento injusto en la campaña electoral del 1-M.

R. Pues no sé a qué voces se refiere, porque a mí nadie me ha planteado semejante cuestión. Tampoco la aceptaría. Pero me deja anonadado. Sólo faltaría, es como si me dijeran que no dé una entrevista a EL PAÍS.

P. Anxo Quintana lo expuso en entrevistas.

R. Creo que hay debates extraorgánicos que no tienen presencia en el BNG. Es sorprendente que alguien plantee un veto a un medio de comunicación.