Ares discrepa del apoyo del PSE de Ortuella a un ex etarra
El consejero de Interior, Rodolfo Ares, dejó constancia ayer en el Parlamento de que no comparte "algunas valoraciones y expresiones" del acuerdo del Ayuntamiento de Ortuella, respaldado por el PSE-EE, para que el ex miembro de ETA Patxi Gómez no reingrese en prisión, en aplicación de la doctrina Parot. Ares satisfizo así parcialmente al PP, que quiere además que el Gobierno inste al Ejecutivo central a recurrir el acuerdo municipal para que se declare nulo. A esto el consejero se negó. Su disconformidad parcial con el acuerdo la mostró después de hacer constar que Gómez "se ha alejado definitivamente de la violencia, se ha reinsertado en el pueblo, arrepentido de sus acciones y, en todo caso, tendrá que responder ante la Justicia".
El portavoz popular, Carlos Urquijo, argumentó que la decisón municipal contraviene la Ley de Víctimas cuando emplaza a los poderes públicos a evitar "situaciones injustas o de desamparo generadas por la impunidad de los terroristas" y también el acuerdo de bases para el cambio suscrito con el PP. En él se invoca, recordó, "la determinación de que desaparezca cualquier espacio de impunidad o intento de legitimación directa o indirecta de la violencia". Ares negó que la posición de los socialistas en Ortuella "debilite" el trabajo del Gobierno en ese terreno e invitó al PP a "valorar como positivo a quienes, aún habiendo estado en ETA, se alejen, se arrepientan y quieran reinsertarse".
"Alergia" del PNV
El consejero mantuvo otro cara a cara con la peneuvista María Eugenia Arrizabalaga, que cuestionó la presencia de especialistas de la Guardia Civil en un curso sobre mercancías peligrosas impartido en la Academia de la Ertzaintza en Arkaute. Ares precisó que fueron tres los agentes del instituto armado, junto a especialistas de los Mossos de la Generalitat catalana, un técnico de la Polícía Foral navarra y otro de la Diputación de Guipuzcoa, y dos ertzainas. "Los mejores y los más expertos para dar ese curso", defendió.
Arrizabalaga fue sucinta en la réplica: "Ya vemos que también se quiere normalizar la Ertzaintza y que esa normalización viene de la aproximación a los tricornios", dijo. Su intervención dio pie al consejero a señalar a Arrizazbalaga que "su problema y el de su partido" es que la presencia de la Guardia Civil, sea en la toma de posesión del lehendakari en Gernika o en Arkaute, "les produce alegia". Ares invitó a curarla con "respeto a la legalidad, a las reglas del juego y a la democracia", tras resaltar la contribución de ese cuerpo "con muchas bajas en el combate contra el terrorismo".
