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Un libro prologado por Feijóo minimiza el impacto del 'Prestige'

La Xunta presenta un estudio de un diputado del PP que avala al Gobierno Aznar

La catástofe del Prestige, el buque petrolero que se hundió ante la costas gallegas en noviembre de 2002 y llenó de fuel las costas de Galicia, el Cantábrico y el Golfo de Vizcaya, no tuvo repercusiones socioeconómicas relevantes. Esta es la tesis que sostiene el libro La incidencia socioeconómica del Prestige en Galicia, un trabajo presentado ayer por Pedro Arias, profesor de Ciencias Económicas y diputado autonómico del PP, que rebasa la literalidad de su título para avalar la muy criticada decisión política del Gobierno de Aznar de alejar el buque de la costa en lugar de llevarlo a puerto. El prólogo corre a cargo del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

Arias, que presentó ayer el libro en la Facultad de Económicas de la Universidad de Santiago en un acto al que asistió la conselleira do Mar, Rosa Quintana, sostuvo que "el dispositivo socioeconómico de salvamento funcionó", y que la contribución del Gobierno central -que cifró en 600 millones de euros-, junto al aumento del precio de las capturas, anuló prácticamente los perjuicios económicos del siniestro. "No cayeron las ventas, no aumentó el desempleo y tampoco la emigración", aseguró.

El trabajo fue encargado por la Consellería de Pesca en tiempos de Enrique López Veiga -antes de la llegada del bipartito al Gobierno autónomo- a través de un convenio con la Universidad de Santiago. Es este acuerdo el que el diputado y profesor esgrime para sortear las sospechas de sesgo político en su análisis. "Es un trabajo científico, que me encargaron por mi currículum y muy transparente en la parte económica", apuntó. También acusó al Gobierno bipartito de enterrarlo cuando estaba listo para su edición porque no le gustaban sus conclusiones. "Este es un caso que no se había dado en la democracia", clamó.

Para Arias, los cambios en la legislación sobre la navegación marítima no impedirían hoy otro Prestige, cuyo hundimiento achacó por entero a los armadores del buque, que sabían que no estaba en condiciones de navegar. Sobre la decisión de no llevar el barco a puerto para evitar el esparcimiento del fuel, Arias aseguró que lo contrario habría sido "ilegal", y que los daños económicos podrían haber sido "el triple".

El trabajo cuenta con la colaboración, en "temas sociológicos", del profesor de la Universidad de Santiago Miguel Cancio. Durante el acto, este sociólogo sostuvo que las críticas a los gobiernos autónomo y central por su gestión de la tragedia formaban parte de una manipulación resultado de la "política neoleninista de desprestigiar y deslegitimar al contrario que se aplica en América Latina". "La peor contaminación es la del medio espiritual", declaró también, en tono grave.

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