De la Vega precisa que el Gobierno recurre la ley de cajas, no la fusión

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernán-dez de la Vega, afirmó ayer en Santiago, durante una rueda de prensa conjunta con el presiden-te de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que el recurso del Consejo de Ministros a la ley gallega de cajas de ahorro "no va contra el autogobierno ni contra la fusión" de éstas. De la Vega repitió la idea de que la norma gallega excede sus competencias autonómicas, mientras que Feijóo enumeró los artículos de las leyes de otras comunidades que en su opinión son idénticos a los que han sido impugnados en el texto del Parlamento autónomo. Del encuentro salió el acuerdo para celebrar próximamente "una reunión técnica", en la que ambas administraciones expongan sus discrepancias.

De la Vega visitaba Galicia para debatir las actuaciones del Gobierno en la comunidad con motivo de la presidencia española de la Unión Europea. Tras dos horas de reunión, la rueda de prensa comenzó en un tono amistoso, que se endureció cuando se abordó el tema de las cajas. De la Vega negó que la actitud del Gobierno central fuese distinta de la que mantuvo respecto a otras leyes de cajas autonómicas. "Nuestra posición siempre ha sido idéntica", aseguró. También se esforzó en reiterar que el recurso no tiene motivaciones políticas y enmarcó el conflicto en la "normalidad democrática de las instituciones". "Hay vías para buscar acuerdos", apuntó, y aludió a la ley madrileña, cuyo recurso fue retirado tras cambiarse los puntos que el Gobierno central cuestionaba.

La vicepresidenta no quiso detallar las discrepancias jurídicas, pero Feijóo sí citó artículos de leyes y hasta aludió a una sentencia del Tribunal Constitucional. "Me vale cualquier artículo de las leyes de las autonomías que no se han recurrido", insistió, y se quejó de que ayer fuese la primera vez en que el Gobierno manifestase que está dispuesto a hablar.De la Vega, que empezó a menear la cabeza en señal de desacuerdo mientras Feijóo comparaba otras leyes con la gallega, rechazó el argumento del agravio comparativo. "No es el momento ni el lugar de entrar a citar artículos", aseveró. "Yo también podría citar artículos de Estatutos que se han recurrido y otros que no", recordó, en una poco velada referencia al Estatuto de autonomía de Cataluña, algunos de cuyos preceptos recurrió el PP a pesar de ser idénticos a los de otras normas autonómicas que sí apoyó.

"Estamos dispuestos a hablar", concedió, y destacó que el Gobierno actual "ha reducido la conflictividad con las comunidades autónomas". Respecto al Fondo Ordenado de Reestructuración Bancaria (FROB), de cuyas aportaciones dependería la fusión para ser viable, la vicepresidenta apuntó que el recurso no implica que se vaya a llegar tarde. "Tiempo hay", aseguró.

A pesar del evidente desencuentro, Feijóo afirmó que se quedaba tranquilo después de que la vicepresidenta dijese que favorecer la fusión de las cajas es competencia de Galicia, y señaló que sentía "un plus de respeto" por De la Vega porque no había "escurrido el bulto" ni optado por escudarse en la agenda para negarse a hablar sobre las cajas.

Los mandatarios también se refirieron a la cuestión de las transferencias de competencias. Feijóo volvió a defender que se hagan por ley, siguiendo el esquema del artículo 150.2 de la Constitución, mientras que De la Vega señaló que esa vía es "válida pero excepcional", y reiteró su preferencia porque las nuevas competencias se asuman con una reforma del Estatuto de Autonomía.

"Mean por nosotros"

El portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, acusó por su parte al Gobierno, tras una reunión extraordinaria de la ejecutiva de la formación nacionalista, de recurrir la ley de cajas con el fin "injusto e injustificado" de "expatriar" el ahorro de los gallegos. "Es un recurso político, no técnico", aseguró, y pidió a Feijóo que exprese "su firme decisión de vetar cualquier fusión o SIP [Sistema Institucional de Protección] con cajas foráneas".

"Cuando mean por nosotros no decimos que llueve", comentó para ilustrar su oposición a un recurso que supone "un ataque para Galicia", ante el que pidió "una gran movilización social". "Galicia está en una encrucijada", sentenció.