Turismo religioso

El próximo 25 de febrero se cumplirán 27 años desde que los castellanos-leoneses accedimos a la autonomía para gestionar mejor nuestros recursos. Es obvio que no hemos sabido hacerlo. Si nuestro gran problema es la despoblación, ésta se ha acentuado. La principal responsabilidad debe recaer en aquellas personas o entidades que tienen los recursos y no los movilizan. Desde la política se intenta pero no es suficiente. La Iglesia católica debe poner sus recursos a disposición de la Comunidad y así recuperar el lugar que le corresponde. Turismo religioso: copiar del modelo Santiago de Compostela, Fátima o Lourdes. Aquí, por ejemplo, "empaquetar" y ofrecer la Ruta de Santa Teresa para atraer turismo cristiano internacional a Ávila, Alba de Tormes y Salamanca, uniéndolo al turismo ecológico por el río Tormes. Monasterios, posadas y mesones se rehabilitarían o se harían nuevos. Hospitales especiales: monasterios infrautilizados podrían ser cedidos a empresas privadas para su explotación a cambio de nuevas inversiones. Hablamos de hospitales para la desintoxicación de personas. Residencias de la tercera edad: centros modélicos en monasterios actualmente con escasa ocupación. Igualmente se cederían a empresas privadas a cambio de nuevas inversiones. A la financiación pública y privada tendrían que arrimar el hombro obispados y órdenes religiosas.