Protestas en Turquía por la ilegalización del mayor partido kurdo
Miles de seguidores del DTP se enfrentan con la policía en el sureste
La ilegalización de la principal formación kurda, el Partido de la Sociedad Democrática (DTP), dictaminada el viernes pasado por el Tribunal Constitucional de Turquía, desató ayer protestas en varias ciudades del sur del país, mientras en Ankara los 21 diputados de la formación abandonaron sus escaños. La decisión del tribunal, que ha levantado dudas tanto en la Unión Europea como en Estados Unidos, supone un golpe a los intentos del Gobierno conservador de base islamista para poner fin a un conflicto que dura 15 años.
Los 11 magistrados del Constitucional han ilegalizado el DTP por considerar al partido un foco de acciones dirigidas contra la unidad del país, y por haber mantenido contactos con el proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), considerado un grupo terrorista por Ankara, Estados Unidos y la UE. Además de declarar ilegal al partido, ha impuesto la prohibición de actividad política durante un quinquenio a 35 miembros de la formación.
La decisión provocó ayer enfrentamientos entre la policía y manifestantes kurdos, que lanzaron cócteles molotov sobre los antidisturbios, que a su vez respondieron con gases lacrimógenos, en la localidad de Hakkari. Una joven resultó herida en ese mismo municipio, donde unos manifestantes atacaron a dos agentes de la policía, según la agencia de noticias turca. También se registraron enfrentamientos en Van y Diyarbakir, la mayor ciudad del sureste del país. También hubo manifestaciones en Estambul.
Numerosos observadores consideran que el partido ilegalizado es la fachada política legal de los rebeldes del PKK. El partido, la única formación prokurda con representación parlamentaria, niega los vínculos orgánicos con esa organización, pero rechaza calificarla de terrorista.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.