"A Coruña contribuye más que nadie y merece un trato acorde"

1. La defensa de las ciudades, de las políticas de progreso de las ciudades, no supone ningún problema para Galicia, sino al contrario, porque la riqueza de las ciudades es la de Galicia. Y mucho menos si se hace como siempre se ha hecho desde A Coruña, con la defensa de los intereses de la ciudad con una visión global, justa y tolerante, como corresponde a una ciudad caracterizada por su solidaridad con el resto de Galicia.

2. Los alcaldes siempre buscan lo mejor para sus ciudades, que sean tratadas de forma justa para de esta manera progresar y mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos. Si las ciudades avanzan y progresan no pierde nadie, sino al contrario, ganan todos.

3. A Coruña es la ciudad que más aporta al conjunto de Galicia, la que tira económicamente de Galicia y la que se encuentra a la vanguardia de las políticas sociales, educativas y sostenibles. A Coruña es la ciudad más solidaria en sus aportaciones al resto de Galicia, por lo que desde A Coruña estamos contribuyendo más que nadie al progreso de Galicia. En consecuencia, también es lógico que exista un trato acorde a los intereses de la ciudad y de sus habitantes.

4. Cuando se invierte en las ciudades nunca se despilfarra. Lo que sí debe haber, y es necesario que la Xunta las lleve a cabo, son políticas que tengan en cuenta a las ciudades, a sus necesidades y a sus intereses. El crecimiento de las ciudades no puede ser más que positivo para Galicia. A nadie se le ocurre en Cataluña discutir la existencia de tres aeropuertos, sino al contrario; lo incorporan como potencialidades. Aquí hacemos al revés y lo cuestionamos en lugar de ponerlo en valor.

5. Lo que tiene que asumir la Xunta es su responsabilidad y gestionar con políticas que den respuesta a los intereses de las ciudades y de sus habitantes. Un ejemplo claro de responsabilidad política es la decisión del Ministerio de Fomento de crear la comisión de coordinación de los aeropuertos.

6. Las ciudades son la mejor vacuna contra el pensamiento único. Ya he dicho en reiteradas ocasiones que me debo en cuerpo y alma a los coruñeses y estoy exclusivamente al servicio de los coruñeses. Defenderé sus intereses como sea y contra quien sea: no dependo de nada, ni de nadie, sólo de los coruñeses.