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Antifraude pide a los partidos un pacto por la honradez pública

La alcaldesa de Santa Coloma paraliza tres proyectos urbanísticos

Un pacto por la integridad institucional en Cataluña que abarque a todos los partidos y que sea "un compromiso más real que teórico" y en el que no valga el "y tú más". El director de la Oficina Antifraude, David Martínez Madero, trazó ayer de manera clara las coordenadas que guiarán su actuación y más allá de las palabras realizó esa petición clara a todas las fuerzas políticas catalanas, coincidiendo con los últimos casos de corrupción.

"Se trata de salvar la confianza en la democracia", dijo el que fue fiscal anticorrupción, antes de reclamar a los dirigentes políticos que sean críticos y responsables, "tanto de sus acciones como de sus omisiones". Por eso, recordó que, por primera vez en democracia, la ciudadanía se ha manifestado en Santa Coloma de Gramenet en contra de la corrupción y arreó estopa por lo ocurrido. "Los corruptos son unos hipócritas, pero el resto, unos ineficaces, porque ningún control ha funcionado ante la sangría incontrolada de millones y millones de euros". En el auditorio figuraban, entre otros, el presidente del Parlament, Ernest Benach; el síndico mayor, Joan Colom, la consejera Montserrat Tura, y parlamentarios de todos los grupos. Bienvenidas sean las medidas anunciadas por el Gobierno catalán contra la corrupción, vino a decir Martínez Madero, pero se han de implementar, porque de lo que se trata de "fortalecer la autoestima" en la democracia.

En lo que fue su puesta de largo ante la clase política y la sociedad barcelonesa, Martínez Madero también aprovechó su intervención en el foro Tribuna Barcelona para reiterar en varias ocasiones que la Oficina Antifraude, que dirige, es un organismo independiente y que así lo demostrará. "No estamos en el Estatuto, pero nos ha aprobado una ley del Parlament", dijo.

Arropado, entre otros, por José María Mena y Carlos Jiménez Villarejo, sus antiguos maestros, también aseguró que "que la ley no vale por sí sola" y que "las actuaciones públicas han de ser legítimas, éticas e íntegras". Por eso apostilló que "para obtener un contrato, una licencia o una recalificación no vale todo". El Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet dio ayer un paso hacia ese nuevo escenario y paralizó tres proyectos urbanísticos de la etapa del anterior alcalde, Bartomeu Muñoz, actualmente en la cárcel de Soto del Real por el caso Pretoria.

Provocar vergüenza

En esa radicalidad en la transparencia de la gestión pública, Martínez Madero dijo que "la tolerancia ante cualquier forma de corrupción ha de provocar vergüenza". También lanzó un mensaje de confianza en las instituciones y sus representantes, y recordó que en Cataluña hay miles y miles de cargos públicos honestos. "La mayoría de ellos no han de temer a la Oficina Antifraude", dijo.

En el turno de preguntas se le planteó a Martínez Madero si el caso Pretoria de corrupción urbanística se hubiera producido con la Oficina Antifraude a pleno rendimiento. "No me gusta especular", respondió, pero sí recordó que ese organismo ya está trabajando y que aflorarán los resultados. Más información en página 3

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