El promotor de Cubics advierte de que el proyecto peligra

Cubics, el proyecto estrella de Santa Coloma de Gramenet está ahora en punto muerto a raíz de la Operación Pretoria. Enric Viñas, propietario de la actual empresa promotora Prosavi, afirma que el vendaval de momento lo ha dejado sin la confianza de algunos acreedores. "De momento ya tengo las líneas de crédito cortadas y los tasadores me dicen que ahora no pueden valorar nada", afirma. Pero, a su juicio, el principal escollo es la modificación de licencia que debe darle el Ayuntamiento.

"Llevo dos semanas pidiendo que me reciban. La respuesta es que la agenda está bloqueada", sostiene Viñas. El promotor, que se desvincula de la trama, además, defiende a Luigi, quien le puso en contacto con el despacho de abogados Pretus, y con el alcalde de Santa Coloma Bartomeu Muñoz.

Prosavi solicitó la modificación de la licencia de obras para aumentar el número de habitaciones del hotel que gestionará Accor (de 80 a 140), las salas de cine (de 7 a 12) y la vivienda libre (de 100 a 150). "Sin estas modificaciones, el proyecto no es viable", sostiene. Cubics cuenta con una inversión total de 90 millones de euros, de los que hasta ahora ha dispuesto 50 millones. Es una cantidad que, dice, "ahora no se puede sostener", por lo que Viñas advierte de que el proyecto peligra en caso de que el Ayuntamiento no le otorgue la licencia.

Viñas compró Cubics por 21 millones en 2005, cuando Luis García Sáez Luigi, al que Garzón señala como el cerebro de la presunta trama corrupta, lo puso en contacto con el despacho de abogados Pretus. En 2001 lo había adquirido una unión temporal de empresas (UTE) formada por Proinosa, Excover y Construccions Riera por 12 millones.

"El bufete de Pretus representaba a una sociedad holandesa tenedora del 98,3% del capital, Ard Choille. El resto estaba en manos de Capçal SL, administrada por Antonio Peñarroja", explica Viñas. El promotor añade que, no obstante, "detrás de la operación estaba Eugenio Mora", ex propietario de Burberrys.

Viñas recuerda que en 2006 esa operación ya fue investigada por Hacienda. Fue entonces cuando, sostiene Viñas, los inspectores hallaron una factura falsa que Prosavi emitió a una empresa asociada. Este pago fue incluido por Garzón en su auto y cifrado en 918.720 euros, pero Viñas lo desvincula de la Operación Pretoria.

Los edificios que deben albergar el hotel y los 100 pisos protegidos que gestionará Cevasa están terminados. Pero sin la licencia del Ayuntamiento no puede arrancar la segunda fase. Viñas explica que, además, ha recibido un burofax de la cadena Accor pidiendo explicaciones a la promotora acerca de su implicación en el caso, aunque confía en que no dará marcha atrás.