Guerra abierta entre CDC y el Palau

La dilación de Convergència Democràtica (CDC) en devolver al Orfeó Català el dinero que recibió de forma irregular a través de Fèlix Millet derivó ayer en un cruce de reproches entre la nueva dirección del Palau y el líder de CiU. Artur Mas, que hace 10 días se mostró dispuesto a negociar la devolución de los 630.000 euros recibidos por la Fundación Trias Fargas, en la órbita de CDC, lanzó ayer todo tipo de pullas hacia el Palau.

La dirección del Palau confirmó el martes que los convenios que justificarían la recepción del dinero por parte de CDC no son válidos, algo que ayer ratificó Mariona Carulla; pero Artur Mas dijo ayer en conferencia de prensa que no sabe nada del Palau de la Música y lamentó que la prensa se entere antes que los partidos de lo que está pasando en esa institución.

"Sería hora de que alguien del Palau se dirigiera a nosotros", dijo. A la pregunta de si finalmente la fundación vinculada a CDC devolverá el dinero recibido, Mas declinó responder y dejó la pelota en el tejado del Orfeó. "Las explicaciones las debe dar el Palau de la Música, no Convergència", dijo. Justificó esta respuesta asegurando que quienes firmaron la recepción del dinero por la Fundación Trias Fargas tenían la autorización de la fundación para hacerlo y que si el ex presidente del Palau Fèlix Millet no estaba autorizado por su institución, éste es "un problema del Palau".

Mas abrió la puerta hace dos semanas a devolver el dinero recibido de forma irregular del Orfeó Català, un total de 630.000 euros, pero varios dirigentes de su partido, como Xavier Trias, aseguraron que esto no ocurrirá.Las reuniones para negociar la devolución del dinero debían comenzar el próximo lunes, pero se han aplazado sine die porque el director de la Trias Fargas, Agustí Colominas, sufrió un accidente de motocicleta el pasado martes. Colominas se rompió una rodilla y debe ser intervenido quirúrgicamente. Según informaron fuentes del Palau, desde la Fundación Trias Fargas han asegurado que, de todas maneras, la próxima semana les remitirán la documentación que consta en su poder para que los auditores de la institución puedan contrastar las cuentas y cuantificar la magnitud del "expolio", como lo calificó ayer el presidente de la Generalitat, José Montilla.

Es una documentación que la dirección del Palau les ha pedido ya por carta, pero que hasta la fecha no se le ha facilitado. Entre los miembros de la junta del Orfeó se consideraba el martes que el acuerdo de devolución es inevitable ya que, decían, "no se trata tanto de un asunto legal como moral". Por otra parte, tampoco era legal, ya que en las investigaciones que ha realizado la dirección del Palau no ha aparecido ningún documento que autorizara a Fèlix Millet a firmar estos convenios en nombre del Orfeó.

La presidenta del Orfeó Català, Mariona Carulla, se refirió ayer a este tema, aunque intentó quitar hierro a las declaraciones de Mas. "En estos momentos no se trata de ver quién tiene que dar explicaciones primero, esto es como lo de si fue primero el huevo o la gallina", señaló Carulla durante la presentaciónd el acuerdo de colaboración del Orfeó con la fundación pedagógica del director de orquesta Zubin Mehta en Bombay. "Lo importante es que pronto tendremos una reunión y sabremos lo que piensan ellos, y a partir de ahí lo que pensamos nosotros".

En aquellos momentos Carulla aún no conocía la suspensión de la reunión, pero sí reconocío que "estaría encantada de que devolvieran el dinero". Lo destinarán, señaló, "a las acciones culturales propias de la entidad que son las que le dan sentido, como los coros, los conciertos o estos actos de colaboración como el que presentamos". Sobre este último caso, la presidenta afirmó que se mantendrá la actividad del departamento de relaciones internacionales que puso en marcha la hija de Fèlix Millet, Clara, que ayer dimitió de la junta del Orfeó. Zubin Mehta señaló que fue el mismo Orfeó el que fue a ofrecerle colaboración a Valencia y él, naturalmente, aceptó. Carulla explicó: "Este proyecto es interesante porque así se da a conocer el Palau en el exterior. Seguiremos haciendo lo que se hacía que estaba bien, aunque se puede mejorar". El proyecto tiene un coste de 145.000 euros, de los que casi 100.000 los aporta el Palau.