Polop destapa una doble contabilidad del ex alcalde asesinado
La aprobación de las cuentas de 2008 de Polop ha puesto de manifiesto un cúmulo de irregularidades cometidas, en principio, por el anterior alcalde, Alejandro Ponsoda, asesinado de varios tiros en la cabeza en octubre de 2007 cuando aparcaba el coche en su casa, en la pedanía de Xirles.
El sustituto de Ponsoda, Juan Cano, también del PP, presentó en el pleno de la semana pasada un informe para la liquidación y aprobación de las cuentas de 2008. El documento indica que al comienzo del actual mandato "estaban en curso diversas obras municipales que no contaron con la adecuada financiación" y que se ejecutaban en función de presupuestos incorrectos. "También se estaban admitiendo facturas con cargo a dichas obras que no se correspondían ni con el valor ni con los conceptos de las mismas". El informe admite que "era continuo recibir llamadas de proveedores para reclamar lo que el Ayuntamiento les debía, por lo que iban apareciendo facturas que no constaban" en ninguno de los dos programas de contabilidad que se utilizaban. El actual equipo de gobierno se ha pasado más de un año intentando poner al día las cuentas. Para ello en 2009 incluyeron todas las facturas pendientes de contabilizar del ejercicio de 2007 y anteriores en un reconocimiento de crédito de 1,62 millones de euros.
En pleno caos, el Ayuntamiento siguió intentando cobrar tributos de algunos vecinos tras haber cedido su recaudación a la empresa SUMA. La suma de ambos conceptos arrojó un remanente negativo de tesorería de casi 2,3 millones de euros a finales de 2007, cuando el presupuesto para 2009 de Polop es de 4,7 millones, casi igual que el de 2004.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.