El congreso del PSE obviará la política de pactos para "fortalecer la unidad"

El PSE-EE saldrá de su congreso del próximo fin de semana en Bilbao con una "nítida" imagen de "unidad" para así "ensanchar" su actual respaldo social y contribuir a "reforzar" la acción del Gobierno vasco. Para ello, según varios de sus dirigentes, "no se hablará de pactos" en el debate de su ponencia política. De hecho, hay quien pronostica que una mera enmienda, hábilmente planteada, puede contribuir a "soslayar" una de las hipótesis de trabajo que se recogen en el borrador de la ponencia oficial. Un documento que, curiosamente, no ha "entusiasmado" en algunos sectores significativos del socialismo vasco. "Desde luego, no está muy trabajada para ser la de un partido en tareas de gobierno", señaló una de las fuentes consultadas ayer por este periódico.

"Hay que recordar que defendemos la idea de acuerdos entre diferentes"

Los socialistas vascos en Madrid asumen el apoyo al 'blindaje'

En la dirección del PSE-EE se considera una "temeridad" que pueda augurarse como línea política la extensión de la alianza con el PP a ayuntamientos y diputaciones a partir de las próximas elecciones locales y forales, en 2011. "No podemos atarnos de pies y manos cuando hemos llegado al Gobierno con un mensaje de acuerdos entre diferentes, de que no nos sobra nadie".

Además, desde estos sectores socialistas se advierte de que un pacto prolongado en el tiempo con los populares provocaría disensiones internas, "y no es el momento de dar esa imagen". Cargos del PSE-EE recuerdan las explícitas declaraciones recientes del alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, refractario a cualquier entendimiento con el PP, así como la férrea oposición del núcleo duro de los socialistas alaveses cuando se planteó la posibilidad de acceder a la moción de censura contra el PNV en la Diputación de este territorio.

Por si no fuera suficiente, los socialistas vascos saben que las negociaciones con el PNV para llegar a un acuerdo sobre los presupuestos del Estado "están muy avanzadas". Según ha podido conocer EL PAÍS, el equipo económico del PSOE ha mantenido un contacto con el grupo de diputados y senadores del PSE-EE para "hacerles ver" que "es vital" contar con los seis votos del PNV a las cuentas estatales. La debilidad parlamentaria de Zapatero desaconseja, por imprudente, que los socialistas vascos aborden cualquier compromiso político de futuro "a nivel local" con el PP, más allá del acuerdo que ha permitido formar "un Gobierno del cambio".

Quienes conocen de cerca los contactos entre socialistas y jeltzales en Madrid admiten que el blindaje del Concierto Económico vasco se ha convertido en el auténtico talón de Aquiles, aunque cobra fuerza la idea de que "saldrá adelante". Eso sí, las reticencias en varias demarcaciones territoriales del PSOE a este apoyo guarda similitud con las ya expresadas desde el PP y que adelantó este diario. "Los socialistas riojanos o el propio Barreda

[presidente de Castilla-La Mancha] no han ocultado su rechazo porque lo consideran un privilegio". A su vez, quienes se oponen al blindaje avisan de que "no sería acertado entregarse tan fácilmente al PNV". Con todo, a medida que se complica la negociación presupuestaria para el Gobierno central cobra fuerza la idea de que el blindaje será una realidad. "Negociar con los partidos más pequeños resultará más complejo, mientras que con el PNV te aseguras seis votos".

Bajo esta perspectiva, la mirada política del PSE en su inmediato congreso va a ir dirigida a "reforzar" las políticas del Ejecutivo de Patxi López y a "ensanchar" la base social tras los últimos resultados electorales, lejos de la política de pactos locales con el PP. Sobre esta base, que algunos entienden como puro "pragmatismo político", no se esperan, "y menos ahora", especiales apuestas "ideológicas".