La líder del PP balear dimite en plena tormenta del Palma Arena

"El PP necesita una fuerza que yo no tengo". Rosa Estarás empleó ayer estas palabras para anunciar que deja la presidencia del PP de Baleares. La eurodiputada popular señaló que lo deja por consejo médico y familiar y que buscará "hábitos de vida más tranquilos". Pero el anuncio de dimisión llega después de que sus colaboradores más cercanos hayan desfilado como imputados por los juzgados de Palma. El PP balear, envuelto en un cúmulo de escándalos por corrupción y en un clima de división abierta en la organización de Palma, queda sin liderazgo, descabezado por segunda vez desde que en el verano de 2007 Jaume Matas pusiera rumbo a Estados Unidos tras no lograr gobernar en Baleares.

Estarás da el portazo un día después de que el juez José Castro haya decidido investigar la presunta relación del patrimonio de Matas con el caso Palma Arena, el magavelódromo cuyo coste casi se triplicó hasta los 110 millones, en el que están imputados una decena de ex altos cargos.

Otros dos consejeros del Gobierno Matas-Estarás (José Juan Cardona y Jaume Font) están imputados en otras dos causas, así como más de una decena de ex directores generales. Una parte de los sumarios por supuesta corrupción aluden a departamentos que estaban bajo la coordinación de Estarás, que era vicepresidenta y mano ejecutora de la política del Gobierno de Matas.

También deja el cargo el secretario general, Guillem Estarellas. La presidencia la ocupará el alcalde de Marratxí, José Ramón Bauzá, elegido ayer por tarde tras un largo debate.Estarás, de 43 años, ya había dejado la presidencia del grupo parlamentario y el liderazgo de la oposición al Gobierno de centro izquierda antes del verano al salir elegida eurodiputada.