Los políticos predominan en el nuevo consejo de EITB

El nuevo consejo de la Radio Televisión Pública Vasca-Euskal Irratia Telebista (EITB) va a estar dominado por las caras de políticos. Los partidos se han alejado del personal independiente y de acreditado prestigio a la hora de designar a sus candidatos y han apostado por sus propios representantes. Los grupos, que han registrado ya en el Parlamento sus propuestas para renovar el consejo, han llegado esta semana a un acuerdo para repartirse los miembros: seis corresponderán al PNV, cinco al PSE, tres al PP y uno a Aralar. Se quedan sin representación los partidos del Grupo Mixto, conformado por EA, EB y UPyD.

El PNV ha propuesto para repetir en el cargo al secretario general de la Presidencia de la Diputación de Vizcaya, Koldo Mediavilla, y al dirigente Aitor Alzola. Completan la propuesta los parlamentarios Íñigo Iturrate y Luke Uribetxebarria, y las ex parlamentarias Elixabete Piñol y Gema González de Txabarri. Mientras, el PSE ha propuesto a cuatro licenciados en Ciencias de la Información: el parlamentario Carlos Gorostiza, el actual miembro del consejo Patxi Doblas y las responsables de prensa del partido en Guipúzcoa y Álava, Alma Fernández y María del Carmen Gómez, respectivamente. La propuesta del grupo socialista se completa con Iñaki Dubreil, concejal en el Ayuntamiento de Ordizia.

Josu Onaindia, de Comisiones Obreras, sustituye a UGT en el consejo

El PP renueva a sus representantes con los parlamentarios Antonio Damborenea e Iñaki Oyarzabal y Juan Muñoz, uno de los responsables de comunicación del partido. Por su parte, Aralar ha propuesto a José Inazio Basterretxea, profesor de la UPV.

También se renovarán los representantes de las organizaciones sociales. Repetirán Juan Ignacio Pérez, por la UPV; Juan José Goiriena, por Eusko Ikaskuntza, y José Luis Lizundia, por Euskaltzaindia. Josu Onaindia representará a Comisiones Obreras, que sustituye a UGT en el consejo, lo que ha sentado muy mal a ELA. La central nacionalista considera que su ausencia supone un "desprecio" a la pluralidad que representa, al tratarse del sindicato mayoritario. Todos los candidatos serán nombrados por el Parlamento en una votación en pleno este mes.