La Real, el fuego y el tambor

Cuando todos los aficionados esperan que esta temporada la Real Sociedad logre renacer de sus cenizas y subir a Primera División con el impulso de su centenario, el club blaquiazul será el homenajeado en las fiestas del 31 de agosto, que conmemoran el trágico incendio que devastó la ciudad en 1813, cuando las tropas angloportuguesas entraron en la capital guipuzcoana, supuestamente para liberarla de la ocupación francesa.

El presidente del club, Jokin Aperribay, tiró del manual para hablar del homenaje en la presentación de ayer. "Es un honor recibir este premio. Lo hacemos con ilusión y estaremos presentes con el alcalde en los actos", señaló antes de precisar que la directiva, el consejo y algunos jugadores participarán en la conmemoración del próximo lunes.

El espectáculo incluirá como novedad una entrega de flores a los asistentes

Itxaso elogió la "energía ciudadana" que impulsó la reconstrucción

El ritual de este año vendrá a ser el mismo a grandes rasgos: un total de doscientos tamborreros de 14 sociedades recorrerán las calles de la Parte Vieja, partiendo a las 18.00 de la Plaza de Zuloaga. Tras una parada frente a la recién rehabilitada Iglesia de Santa María, donde los fusileros efectuarán una carga simbólica, la comitiva desembocará en el Boulevard, allí donde en su momento se ubicó la Puerta de Tierra, para depositar ramos de flores en la placa que recuerda a las víctimas.

La novedad de este año será que los 200 tamborreros -límite máximo para que el todo suene armónico, incorporar a más distorsionaría la música, según los organizadores, que tienen que ponerse selectivos ante la creciente cantidad de voluntarios- harán entrega a los presentes de una flor como símbolo de paz. Poco después vendrá el simulacro del incendio del polvorín que propició el desconcierto entre las tropas napoleónicas y permitió a los asaltantes, comandados por Sir Thomas Graham y con el Duque de Wellington como generalísimo, culminar con éxito su asedio de San Sebastián, con saqueos, violaciones y asesinatos de por medio. A las 21.30, la plaza de la Trinidad revivirá la quema de la ciudad para minutos más tarde, dejar iluminada por las velas la Calle 31 de agosto-otrora calle de la Santa Trinidad, que acogía a las 36 viviendas que se salvaron del fuego-.

El concejal de Cultura y Juventud, Denis Itxaso, sustituto habitual del alcalde cuando el primer edil no puede acudir a estos compromisos, destacó por su parte la "energía ciudadana" que mostraron nuestros antecesores al decidir que debían reconstruir la ciudad y que ésta debía abrirse a las murallas en su nueva etapa, marcando así el devenir de la nueva San Sebastián.

Mientras tanto, la organización busca por todos lados las partituras necesarias para cumplir su promesa del pasado año de incluir marchas napoleónicas en el espectáculo -"la primera vez que la escuché pensé 'coño, si parecen las de Sarriegui", señaló Gabriel Otegui, de la sociedad Kainoieta-. Contactaron con el Elíseo, cuartel general de la presidencia francesa, y con la Embajada gala en Madrid, pero de momento no ha habido suerte. "Pónlo en el periódico, a ver si así nos hacen más caso".