Ernest Maragall plantea un gobierno de coalición PSOE-PSC en Madrid

El culebrón del verano en Cataluña, esto es, el debate sobre la necesidad de llevar a cabo una manifestación preventiva ante la posibilidad de una sentencia del Tribunal Constitucional (TC) contraria al Estatuto catalán ha dado un vuelco inesperado. Y revolucionario. El consejero catalán de Educación, el socialista Ernest Maragall, propone un Gobierno de coalición PSOE-PSC en La Moncloa. En un artículo de opinión que hoy publica EL PAÍS (véase la página siguiente), la propuesta del consejero va más allá de la creación de un grupo propio del PSC en el Congreso, posibilidad que considera al referirse a la visualización del pacto "de forma clara por la consecuente expresión parlamentaria". Maragall abre el pacto a otras fuerzas políticas, al referirse al Gobierno de coalición con "los apoyos adicionales que sean necesarios". El PSC aporta 25 de los 169 escaños que tiene el PSOE.

El Consell Executiu se reúne hoy después de las vacaciones

Ernest Maragall entiende que la fórmula anterior no sólo es la mejor para "legislar", "gobernar" y "construir Cataluña" desarrollando al máximo el Estatuto, sin otro techo que no sea el "pacto" sellado en su día "entre Cataluña y España", a través de sus respectivas cámaras parlamentarias. También es lo que más interesa a su partido, el PSC, y lo que -dice- salvará al presidente de la Generalitat, José Montilla, en los comicios catalanes, previstos para otoño de 2010. "Es la perspectiva que interesa al PSC, la que permite plantearse las próximas elecciones catalanas con todas las ambiciones, la que otorgará al presidente Montilla la posibilidad de representar una amplia mayoría social", escribe.

El consejero de Educación defiende que se desarrolle el Estatuto sin pensar en la sentencia del TC porque el "pacto Cataluña-España está cerrado y rubricado", y refrendado por el voto de los ciudadanos, que es "la única voz indiscutible e incontestable". "Cataluña no está interesada en revisarlo", zanja.

Maragall añade, a propósito del papel del Constitucional, que el Alto Tribunal es el auténtico "rey desnudo" del sistema democrático español, y que, en cualquier caso, la aplicación real del Estatuto, la deberán hacer los futuros miembros de este organismo, con personas y mayorías diferentes de las actuales.

Con todo, Maragall no descarta la posibilidad de llevar a cabo "una gran manifestación". Pero sólo entendida como un "gesto de afirmación", antes que de "respuesta" o "reivindicación".

La polémica sobre la manifestación marcará el Consell Executiu de hoy, el primero tras las vacaciones estivales, que aprobará, previsiblemente, el proyecto de ley para designar a los senadores que representan a la Generalitat.