Espionaje a políticos de Madrid
El consejero de Interior del Gobierno de Madrid, Francisco Granados, fichó como asesor personal de seguridad al ex inspector de policía Marcos Peña, así como a los ex guardias civiles José Luis Caro, José Oreja y Antonio Coronado, también como asesores de seguridad. Por su parte, Esperanza Aguirre fichó a Sergio Gamón, que durante un tiempo fue director general de la Seguridad Ciudadana.
Como se ve, seguridad por todas partes, superseguro, que se dice ahora. Pues bien, pese a las pruebas -partes de seguimiento y localización de teléfonos móviles- que implican, directa o indirectamente, a todos los mencionados en el espionaje ilegal a personas por razón de su cargo político, todos han declarado enterarse de esas acciones ilegales por la prensa.
Vamos, que con tanta seguridad, ni los propios espías sabían que estaban espiando. Y no digamos los que coordinaban, a los que sólo les falta negar que conocían a los espías. Por seguridad, seguramente.
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