Urkullu ve en la campaña de Interior contra las pintadas "excesos" que rozan la "injerencia"
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, asumió ayer personalmente las críticas de su partido contra la campaña de tolerancia cero decidida por el Departamento de Interior contra las pintadas y pancartas en favor de ETA en las calles. En su opinión, la consejería de Rodolfo Ares está cometiendo "excesos" al requerir a los ayuntamientos la retirada en 24 horas de estos símbolos, con la amenaza de que en caso contrario lo hará la Ertzaintza y pasará los gastos a los municipios.
El anuncio hecho el martes por Ares de que destinará un fondo de 500.000 euros a esta tarea y que se reunirá en los próximos días con el presidente de la Asociación de Municipios Vascos-Eudel para articular una actuación conjunta en esta materia, no contuvo a Urkullu. En una entrevista en Radio Popular, el presidente peneuvista aseguró que los requerimientos de Interior pueden interpretarse como "injerencias" en otras instituciones, como son los ayuntamientos. Apuntaba así a la argumentación contenida en una pregunta parlamentaria presentada por el PNV en la que se le pide a Ares que precisa en qué precepto legal se basa para dar órdenes perentorias a los municipios. La Ley vasca de Víctimas insta a que las instituciones públicas retiren símbolos y elementos que resulten ofensivos para su momoria o supongan exaltación del terrorismo, pero no establece ninguna pauta concreta.
El PNV considera "inadmisible" que se sugiera que antes había impunidad
Al margen de esta discrepancia procedimental, el malestar del PNV se basa en la consideración de que el Gobierno de Patxi López pretende "dar a entender que hasta ahora ha habido espacios de impunidad" en este ámbito, según apuntó Urkullu. El primer partido de la oposición cree que, con su política de firmeza sin reservas contra el terrorismo y su entorno, el Ejecutivo socialista lanza el mensaje de que los gobiernos nacionalistas que le precedieron fueron tolerantes con la violencia. Eso "no es admisible" para el PNV, recalcó ayer su presidente.
