La patronal bancaria prevé "serias dificultades" para algunas entidades
La AEB cree que el respaldo público debe limitarse a cajas y bancos viables
La crisis cogió cuerpo en los mercados virtuales de las finanzas, pero es el embate sobre la economía de carne y hueso, el cierre de empresas y la destrucción de empleo, lo que amenaza con arrastrar a algunas entidades financieras españolas. Es el panorama que describe la Asociación Española de la Banca (AEB) en su informe económico-financiero de junio. "No cabe excluir que algunas entidades pueden experimentar serias dificultades en un futuro no lejano", afirma la patronal bancaria en el informe, publicado ayer en su página web.
Tras recordar que "el sistema bancario español afrontó sin dificultades particulares la primera fase de la crisis financiera", la AEB destaca que la recesión española y mundial llena de nubarrones el horizonte del sector: "Las dificultades que atraviesa están relacionadas con la caída del volumen del negocio, el deterioro del grado de solvencia de los demandantes y la gestión del inevitable proceso de desapalancamiento del sector privado".
La asociación pide una reforma laboral y da por agotado el margen fiscal
La AEB matiza que el impacto de la crisis sobre las cuentas de resultados es heterogéneo, pero suficientemente intenso como para "poner de manifiesto el exceso de capacidad que es necesario ajustar". Y constata que las entidades financieras han desarrollado estrategias de racionalización de costes, y en algunos casos, de cierre de sucursales.
Ante la perspectiva de que estos pasos no sean suficientes para resolver la situación de algunas cajas y bancos, la AEB valora el Fondo para la Reestructuración Ordenada Bancaria, recién constituido por el Gobierno. Pero aprovecha también para lanzar una advertencia: "El objetivo debe ser reforzar el sistema en su conjunto y no el de reflotar transitoriamente algunas entidades concretas". Y por si no queda claro añade que las "medidas de apoyo deben limitarse a entidades con viabilidad y supeditarse a un firme compromiso de reestructuración".
Como otros informes recientes de servicios de estudios y centros de investigación, la AEB apunta a la tesis de que la crisis toca fondo, aunque la recuperación se antoja aún lejana. "Algunos indicadores recientes, tanto en la vertiente financiera como real, muestran una menor intensidad en el proceso de caída, aunque será necesario que transcurra un cierto tiempo, ya entrado 2010, hasta recuperar tasas de crecimiento positivas, y aún más, para que éstas alcancen el nivel suficiente y generar empleo neto".
Lo que sí da por agotado la AEB son los márgenes de actuación de la política fiscal y presupuestaria del Gobierno, tras "una amplia gama de medidas destinadas a sostener el gasto y asegurar un determinado nivel de rentas".
La patronal bancaria echa en falta "una actitud más decidida en la puesta en marcha de medidas estructurales", entre las que cita "la reforma del mercado laboral mediante la incorporación de modalidades de contratación capaces de generar empleo", "la promoción de la política de la vivienda de alquiler" o "el reforzamiento de la competencia en el sector servicios".
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