Bilbao anuncia al 'lehendakari' que la Diputación dejará de pagar el metro

El diputado general de Vizcaya, el peneuvista José Luis Bilbao, ariete en las últimas semanas en la confrontación pública con el Gobierno de Patxi López, se presentó ayer a su primera cita oficial con el lehendakari pisando fuerte y picando alto. Lehendakaritza no quiso ofrecer en todo el día su valoración del encuentro, que duró casi dos horas, y cuyo contenido desveló el propio Bilbao en la sede de la Diputación vizcaína por la tarde.

Bilbao le anunció a López que dejará de pagar el metro, cuya financiación comparten ahora ambas instituciones, lo que sumado a los expedientes y peticiones que le dejó sobre la mesa asciende a 1.090,5 millones. De ellos, 1.085 son para Vizcaya; el resto son cantidades que López tendría que reclamar de la Hacienda central para Álava (6 millones) y para Guipúzcoa (11,8 millones).

Bilbao le indicó al lehendakari que en adelante el Gobierno deberá "hacerse cargo", en su totalidad, de la financiación de las líneas 2, 3, 4 y 5 del metro de Bilbao. En ello está implícito el anuncio de que la Diputación vizcaína dejará de aportar los 42 millones anuales que tiene comprometidos hasta 2029, cantidad que este año se eleva a 59 y el próximo a 75 millones, según las cifras que ofreció. En total, serán 890 millones los que ten dría que añadir el Ejecutivo a los que ya pone en el proyecto del metro. Bilbao justificó esta exigencia en el mayor nivel de endeudamiento de la Diputación vizcaína respecto del Gobierno y en que es el único de los tres ejecutivos forales que está financiando proyectos de transporte público. Hasta ahora, los sucesivos gobiernos nacionalistas y las diputaciones, siempre del mismo signo, han estado cofinanciando sin problemas las obras del metro. El corte que ahora plantea Bilbao puede tener una lectura política, al producirse justamente cuando el Gobierno cambia de color, pero el diputado general dejó claro que nos las teme. "Pueden hacerse las [lecturas] que se quiera. Ahora necesitamos recursos financieros para otras cosas", respondió al ser preguntado por ese extremo.

Además, el diputado general expuso a López otras exigencias económicas. Para el proyecto de nuevo museo Guggenheim en Urdaibai quiere que el Gobierno comprometa 100 millones, y otros 55 para el nuevo campo del Athletic. Ambas peticiones las formuló ya sin éxito al Gobierno de Ibarretxe. Bilbao dijo que todos los proyectos se harán en cualquier caso, porque todos son "estratégicos y necesarios" para Vizcaya.

También expuso al lehendakari la necesidad de 30 millones en avales para un proyecto en el sector de la automoción, destinado a mantener "vivos y preparados en utillaje" a los pequeños talleres de la industria auxiliar para el momento en que las cadenas de montaje vacíen sus almacenes y reanuden los pedidos. Calculó que eso ocurrirá en dos o tres meses.

Bilbao pidió también ayudas para el sector lácteo vizcaíno, cuestión en la que López le indicó que ya está trabajando, según dijo, aunque en este caso no cuantificó su alcance. Tampoco lo hizo con la petición de traer a Vizcaya "un centro de gran ciencia para compensar la pérdida de la Fuente de Neutrones por espalación".

El diputado general indicó también que puso en conocimiento de López datos procedentes del anterior Gobierno, según los cuales la Hacienda central adeudaría a las tres haciendas vascas 35,5 millones, y le emplazó a reclamarlos. Relató que le dijo a López que en esa reclamación a Madrid tiene "su primera oportunidad" para poner en práctica la afirmación realizada en su discurso de investidura de que si tiene que enfrentarse al Gobierno central, lo hará. "Que dé la cara. Hay que marcar territorio y defender el dinero de este país", instó.