Martinsa quiere vender una filial para reducir deuda

Martinsa-Fadesa busca oxígeno con la venta de filiales que no están en suspensión de pagos. Los administradores concursales, a instancias de la propia empresa, han solicitado al titular del Juzgado de lo Mercantil número 1 de A Coruña que autorice la venta de una de las empresas del grupo, que colocará en el mercado a través de una subasta pública ante notario y con un precio de salida de 300.000 euros. Así consta en un escrito en el que los administradores detallan las características de la operación de enajenación de la filial Aplistone, que gestiona canteras de áridos y de la que Martinsa es propietaria a través de Eurogalia, otra de las empresas del grupo.

La solicitud al juzgado viene motivada, según se explica en el escrito, por tratarse de una de las sociedades puestas en prenda a favor del sindicato bancario como consecuencia de la refinanciación de la deuda de Martinsa previa al concurso de acreedores, operación sobre la que el juez ya ha dictado medidas cautelares. De no realizarse la venta, advierten al juez, la compañía entraría en concurso de acreedores.

Martinsa-Fadesa ya había adelantado en el plan de viabilidad que procederá a realizar subastas de suelo, su principal activo, con el fin de enjugar parte de su deuda, superior a los 7.000 millones de euros. Por otra parte, la inmobiliaria registró la semana pasada en la Comisión Nacional del Mercado de Valores la convocatoria de la junta general de accionistas, a celebrar en junio.