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El dinero y las licencias monopolizan el pleno municipal

El pleno aprueba un plan, rechazado por la oposición, para sanear las cuentas

Daniel Verdú

El portavoz de IU, Ángel Pérez, está preocupado por su colesterol. Dice que para combatirlo, para erradicarlo de su lista de inquietudes, tiene un método infalible: no hacerse análisis. Eso, sostiene él, es lo que hace el Ayuntamiento en cuestiones como la contaminación, en la que se han eliminado las estaciones de medición, o en la tramitación de licencias, donde cree que no se ha afrontado el problema. Pérez, que suele ser convidado de piedra en las discusiones entre PSOE y PP (en algún debate ha llegado a ofrecerse para traerles un café), no dio ayer grandes soluciones a la crisis, pero amenizó bastante un pleno monopolizado por el dinero. O por la falta del mismo.

- "Es usted muy desagradable". Bastante temprano se enzarzaron el portavoz del PSOE, David Lucas, y el concejal de Economía, Miguel Ángel Villanueva. Venía el socialista con el ánimo conciliador y propuso la creación de una mesa de trabajo para la crisis. Pero salió escaldado. "¿Qué es una mesa de trabajo, señor Lucas?", soltó Villanueva.

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A partir de aquí, el concejal de Economía, en un tono bastante ácido, le recordó a Lucas que "ya hay 157 medidas pactadas con los sindicatos".Y que Lucas no se hubiera enterado de ese acuerdo con los sindicatos le pareció a Villanueva inaudito. Además, le recriminó que su plan para la mesa de trabajo que proponía sea sólo "una nota de prensa de dos páginas con 10 apartados" que presentó el pleno anterior. "Lo suyo es de traca, señor Lucas", volvió a disparar Villanueva.

El portavoz del PSOE, visiblemente molesto con el tono de los reproches que recibía, quiso no entrar al trapo, pero lo hizo de lleno. "No voy a entrar en sus sarcasmos ni en lo desagradable que es usted", contestó el socialista. Ésa, la de que Villanueva es "un desagradable", fue la broma de la mañana en la cafetería de la plaza de la Villa.

El portavoz del PSOE volvió a sacar a relucir el desorbitado coste del coche oficial en el que viaja el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón. Su A-8 blindado cuesta 591.000 euros. Más caro que el que generó una demoledora polémica para el ex presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño (el suyo costaba 480.000 euros). Para Lucas, la austeridad del Ayuntamiento tendría que empezar por ahí.

- Margen para morosos. El concejal de Hacienda, Juan Bravo, anunció ayer, tras solicitárselo IU, que el mes que viene introducirá una modificación en la ordenanza para que los ciudadanos que no puedan hacer frente al pago de sus tributos tengan un margen de hasta 5.000 euros para que se les exijan garantías bancarias. Hasta ahora el límite estaba fijado en 1.500 euros.

Además, Bravo dijo que tiene interés en "tener capacidad legal para abordar más modificaciones" en esta línea, como por ejemplo "poder hacer deducciones de hasta el 50% en el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI)", algo que no se podrá hacer "hasta que el Gobierno de la nación lo permita" a través de la modificación del sistema de financiación de haciendas locales.

- Sanar al enfermo. Un poco antes, el pleno había aprobado el plan de saneamiento económico de Bravo. La oposición lo rechazó, pero en el Ayuntamiento manda la mayoría del PP. Así que tira adelante, eso sí, con la aceptación terminológica en su voto a favor de que lo que se está haciendo es sanar a un enfermo.

La operación consiste, grosso modo, en congelar el gasto municipal hasta 2015. Reducción drástica de infraestructuras pagadas por los madrileños. Con los 500 millones del Plan E de este año y los más de 300 del año que viene se construirá la mayor parte de todo lo que se tenga que hacer. De este modo, se recuperarán, año a año, los casi 1.200 millones de deuda a los que tiene que recurrir ahora el Ayuntamiento para pagar a proveedores que llevan esperando el dinero casi seis meses (tres más de lo legal).

- Críticas al sistema de tramitación de licencias. Ni a la oposición ni a los técnicos encargados de supervisar la ordenanza de tramitación de licencias les gusta cómo funciona y cómo se está reformando el modelo. El concejal del PSOE Pedro Sánchez aludió ayer al informe interno del Ayuntamiento publicado por EL PAÍS en el que los propios técnicos califican el proceso de "caos normativo", "indefinición" o "falta de uniformidad preocupante en la tramitación". De ello le pidió explicaciones a la concejal de Urbanismo, Pilar Martínez.

Pero a ella no le hizo gracia que Sánchez entresacara "frases del informe a su gusto y medida, instrumentalice las cosas en su beneficio" y "saque una memoria" para tirársela "a la cara". Martínez, sin embargo, admitió su contenido, pero adujo que no lo había escrito "un diplomático, sino un técnico" (justificando así la crudeza del mismo).

La cifra económica de todo este debate es que las 21.000 licencias pendientes de resolver por el Ayuntamiento suponen unos 18 millones de euros para las arcas municipales.

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Sobre la firma

Daniel Verdú
Nació en Barcelona pero aprendió el oficio en la sección de Madrid de EL PAÍS. Pasó por Cultura y Reportajes, cubrió atentados islamistas en Francia y la catástrofe de Fukushima. Fue corresponsal siete años en Italia y el Vaticano, donde vio caer cinco gobiernos y convivir a dos papas. Corresponsal en París. Los martes firma una columna en Deportes

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