La falta de suelo escolar deja sin colegio a 109 niños en Marbella
Al menos 109 niños de Marbella (Málaga) corren riesgo de quedarse sin escolarizar el próximo curso porque el desorden urbanístico del gilismo ha convertido en viviendas ilegales los suelos destinados a equipamientos educativos, sanitarios o zonas verdes. Ni los directores ni las asociaciones de padres de los colegios públicos marbellíes, ya masificados, admiten a estos alumnos, casi todos ellos de tres años, en aulas provisionales.
La Consejería de Educación de la Junta de Andalucía (PSOE) se escuda en que el Ayuntamiento marbellí, gobernado desde hace dos años por Ángeles Muñoz, del PP, no le ha cedido suelo para construir centros educativos pese al déficit de plazas escolares públicas que sufre la ciudad.
La edil de Educación, Carmen Díaz, se justifica diciendo que es imposible ceder parcela alguna hasta que no se apruebe el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), algo previsto para finales de año.
Planes parciales
El concejal de la oposición Javier de Luis (PSOE) rebate su versión. "La Comisión Gestora [organismo que sustituyó al Ayuntamiento de Marbella tras su disolución en abril de 2006 por el caso Malaya] liberó tres parcelas para centros educativos en un año y lo hizo tramitando planes parciales que no necesitaron aprobar el nuevo PGOU", asegura.
Por el momento, la Junta trabaja con la posibilidad de construir un "colegio provisional", aunque sigue dependiendo de que el municipio ceda unos terrenos adecuados. El centro contaría con profesorado propio y podría convertirse en definitivo "si la calificación de la parcela lo permitiera", explica una nota de la Junta.
"No existen los colegios provisionales, hablan de aulas prefabricadas. Estamos cansados de que nos impongan su solución", se queja la edil marbellí de Educación.
Los padres, que se han reunido con las dos administraciones por separado, exigen una solución. "Nos gustaría que recolocaran a los niños en aulas prefabricadas de colegios ya abiertos, y que al año siguiente en lugar de sacar 50 plazas, salieran 25, de forma que nuestros hijos ya se quedaran", dice Javier León, miembro de una comisión de padres afectados.
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