Los vascos realizan el mayor esfuerzo de España para comprar un piso

El esfuerzo para comprar vivienda en Euskadi es el más alto de toda España con relación al salario, según señaló ayer Julio Rodríguez, vocal del CES de Madrid y adjunto a la dirección del España. El experto en vivienda acudió a La Tribuna del CES en la capital vizcaína para analizar la relación entre la crisis económica y la inmobiliaria. Tras destacar que el País Vasco cuenta con el precio medio de la vivienda más alta de España, también subrayó que es la comunidad con un mayor parque de viviendas de protección oficial. En todo caso, destacó que también se da la contradicción de que la diferencia entre la VPO y la vivienda libre es la más alta de toda España, lo que convierte a la protegida en "un chollo".

Rodríguez, que anticipó que el descenso del precio de la vivienda será todavía de un 10%, señaló que en España los particulares se ha endeudado muy por encima de sus posibilidades. La conferencia fue presentada por el presidente del CES vasco, José Luis Rodríguez, quien advirtió de que la crisis económica destruyó 500 empleos en la Construcción en Euskadi en 2008. A finales de 2008, esta actividad representaba el 8,2% del total del empleo y ocupaba a 78.000 personas, un 9,2% menos que en 2007.

La crisis llega más tarde

Tanto el presidente del CES como el ponente destacaron que la estructura productiva de Euskadi es más equilibrada que la del conjunto de España y el peso de la construcción menor desde el punto de vista de empleo y de producción (12,1% del empleo y 10,6% del PIB nacional en 2008). Julio Rodríguez aseguró que el menor peso ha permitido que la crisis llegara más tarde a Euskadi pero que esta comunidad no se iba a librar de la situación.

Julio Rodríguez destacó que el ajuste del mercado de vivienda está teniendo lugar a través de un "acusado" retroceso de las ventas, mientras que los descensos efectivos de los precios de venta son "más que moderados". En su opinión, 2010 puede resultar un ejercicio "menos negativo" que los de los dos años precedentes. Sin embargo, Rodríguez manifestó que resultará difícil evolucionar hacia un modelo sustancialmente alternativo de composición de la oferta y del empleo en España, que no cabe imponer de forma drástica.

Según él, es imprescindible reducir el déficit exterior, lo que exige "reforzar la competitividad". Asimismo, aseguró que las Administraciones y los agentes sociales deben contribuir a conseguir una mayor diversificación. "Lo sucedido en 2008-2009 justifica la conveniencia de huir de excesos tales como los producidos en la década prodigiosa de 1997-2007", dijo.