La primera subasta de pisos en Galicia acaba sin ventas
La organización atribuye el fracaso de la puja a la crisis, pese a que la sala se llenó
Las 200 sillas preparadas para la primera subasta "a la baja" de pisos en Galicia no fueron suficientes. A partir del mediodía de ayer la sala empezó a llenarse de curiosos y promotores intentando pasar por compradores. Pero el recinto iba vaciándose cada vez que se cerraba un lote y ni una sola mano pujó por alguno de los 55 inmuebles, a los que la empresa Subasta Directa pretendía dar salida. "Si la crisis impide a la gente comprar una casa, ¿cómo va plantearse comprar una segunda?", se justificaba Ernesto Jiménez, de la empresa.
Esta iniciativa tiene como objetivo vender los pisos que los promotores -en Galicia un total de 11- no consiguen adjudicar. "Y eso que les decimos que bajen más el precio", explica Jiménez que asegura que de no hacerlo, no conseguirán vender. "105.000 euros y no puedo bajar más", repetía el vocal antes de cerrar cada lote mientras señalaba una pantalla con el plano. "Ático de 60 metros, con garaje y plato de ducha, a 200 metros de la playa". "Pues a este precio yo no compro", murmuraba uno de los presentes.
El lote 21 trajo la única ilusión de venta a Santiago. Una mano se alzó entre los asistentes. La sala se revolvió, todas las caras se giraron hacia aquel hombre y la mesa de subastas se iluminó. "Perdone", dijo, "¡Sí! dígame, caballero". "Verá... Acaba de decir que la casa tiene dos habitaciones pero en plano sólo sale una". Entonces respondió: "Tiene usted razón, vaya despiste".
La queja general era que los inmuebles -ubicados en Moaña y Ribeira-, aún con el 30% de descuento prometido, eran muy caros. Los allí presentes ni siquiera habían visto los pisos antes de la subasta porque, según la organización, cuando se anunció la puja no dio tiempo a que los interesados concertaran citas con la franquicia gallega. Subasta Directa espera que "se haya removido el interés" y se produzca alguna compra en la próxima subasta, que será en Vigo en tres semanas.