La Caja Vital acometerá una fuerte reducción de sus gastos por la crisis
La política de "austeridad" afectará a la dirección y a toda la organización
La Caja Vital va a adoptar medidas excepcionales para hacer frente a una coyuntura especialmente crítica. Su presidente, Gregorio Rojo, anunció ayer ante la asamblea general que la entidad alavesa ha incluido en su plan de gestión de 2009 "un ajuste muy serio de los gastos generales", que afectarán "a los órganos de gobierno y a toda la organización". "Ha llegado el momento de la austeridad".
La crisis económica mundial es la causante de esta nueva política interna. Pese a ello, la Vital espera aumentar un 3% sus beneficios en el presente ejercicio, lo que demuestra, según su máximo responsable, que la caja está "aguantando con éxito los embates más duros gracias a una escrupulosa prudencia en la gestión de los riesgos". Rojo afirmó ante la asamblea que los índices "positivos" de solvencia, liquidez, eficiencia, así como el de morosidad, de la Vital son comparativamente "mucho mejores" que los del conjunto del sector.
Rojo: "Ha llegado el momento de la austeridad. 2009 será peor que 2008"
La Caja Vital obtuvo el año pasado un beneficio neto de 74,9 millones de euros, un 5,29% más que en el ejercicio anterior, y tiene previsto cerrar 2009 con un crecimiento moderado que podría rondar el 3%, según anticipó Rojo a los miembros de la asamblea. No obstante, el presidente lanzó la siguiente advertencia: "Si 2008 ha sido un año difícil, 2009 lo va a ser aún más". Dibujó un oscuro panorama de la economía, cuya recuperación alargó incluso tres años. Ante esta situación, Rojo auguró un aumento de la morosidad empresarial -debido a la caída de la actividad industrial-, que se sumaría a la ya existente en el mercado inmobiliario.
El máximo dirigente de la caja alavesa negó que la entidad haya recibido fondos públicos para sanear su balance, en contra de la "creencia popular" de que las entidades financieras españolas han recibido una inyección económica del Gobierno. La Caja Vital "no ha recibido cantidad alguna", afirmó rotundamente. Precisó que sólo ha participado en "algunas subastas" para obtener préstamos que "están sirviendo para seguir financiando a las familias, a los autónomos, a los comerciantes y a las empresas". Rojo aprovechó para apelar a la comprensión de los clientes de la caja por haberles encarecido ligeramente el precio de los préstamos para poder "seguir manteniendo la solvencia de la entidad".
En el tramo final de su intervención, explicó que las ganancias obtenidas en 2008 permitirán a la Caja Vital destinar este año 26,8 millones a la Obra Social, un 6,96% más que en el pasado ejercicio. Rojo destacó que la competencia ha reducido esa aportación en un promedio del 16%. Con estos recursos rematará el proyecto denominado Vitalquiler, que contempla la construcción de un millar de pisos de alquiler para jóvenes a precios subvencionados.
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