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El PSOE lleva a Bruselas la reforma de la cornisa del Manzanares

Carlos Carnero, eurodiputado por el PSOE, ha pedido a la Comisión Europea que intervenga para que, antes de que se acometa el llamado Plan de Reforma Interior de la Cornisa del Manzanares, se evalúe su impacto ambiental, medida que considera "insoslayable". Este proyecto, aprobado el 28 de febrero por el equipo municipal de Gobierno del PP, con la oposición vecinal y la municipal de IU y PSOE, permite al Arzobispado construir numerosas edificaciones -una de ellas de 170 metros de fachada- en un área ataludada del contorno de San Francisco el Grande y Las Vistillas. La zona configura la línea más característica del paisaje madrileño. Además implicará la pérdida de 15.000 metros cuadrados de superficie verde poblada con cientos de chopos, abetos y pinos.

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¡Cuánto cura, cuánto cemento!

El PSOE quiere de esta manera evitar que el Ayuntamiento eluda el pertinente estudio de impacto medioambiental, como sucedió con el soterramiento de la M-30, que implicó la apertura de expedientes sancionadores por infracción por parte de la Comisión Europea. El eurodiputado Carnero alega que ni el Ayuntamiento ni el Gobierno regional han puesto en marcha ningún estudio para calibrar los efectos que la reforma de la cornisa pueda acarrear y cuyo impacto los vecinos temen dañinos e irreversibles.

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