La demanda eléctrica de la industria cae un 18% por la menor actividad
Las empresas del sector hacen frente al mayor descenso del consumo desde 1997
No es un secreto de Estado, pero en sus detalles, casi entra en la categoría. Ni las empresas energéticas ni la Administración están dispuestas a facilitar detalles de cómo está cayendo el consumo energético por sectores. Los analistas y sus lápices, que pueden pinchan el valor de las acciones en un santiamén, acechan. Pero con los datos sucede como con las meigas, que haberlos haylos. Y muestran un desplome espectacular del consumo eléctrico industrial, de hasta el 28% en comunidades como el País Vasco y caídas importantes en otras comunidades como Madrid o la Comunidad de Valencia.
Las compañías eléctricas están haciendo frente a una caída de la demanda de electricidad sin parangón desde el año 1997, según datos de Red Eléctrica de España (REE). En palabras del consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda, el año 2009 puede ser el peor en medio siglo en lo que a consumo eléctrico se refiere. La causa fundamental está en la caída de la actividad industrial.
Donde más se nota el efecto de la crisis es en el País Vasco
Hay compañías que se replantean sus contratos de suministro
Parafraseando a Winston Churchill, nunca tantos quisieron fabricar tantas cosas para venderlas a los pocos que pueden comprarlas. El resultado es un parón impresionante que está afectando al sistema eléctrico.
En los meses de enero y febrero, según Red Eléctrica de España, el consumo eléctrico alcanzó los 44.201 Gigawatios-hora, un 7,2% menos que en el mismo periodo de 2008. Corregidos el calendario laboral y la temperatura, el descenso de la demanda en el periodo es del 8,3%. Eso, en un invierno anormalmente duro y frío que ha sostenido a duras penas el consumo residencial.
Pero la clave de la caída del 8,3% del consumo en lo que va de año está en la actividad industrial. La producción del sector disminuyó en el mes de enero un 20,2% con respecto al mismo mes de 2008, la mayor caída desde el año 1993, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
La crisis golpea con fuerza a la industria que más energía demanda en sus procesos. La Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía (AEGE), que agrupa a algunas de las grandes multinacionales con actividad en España (siderúrgicas, cementeras, empresas de fertilizantes...) ha mantenido reuniones recientes con el Ministerio de Industria para dar cuenta de la situación. Fuentes de la asociación la resumen así: fuerte caída de actividad, de hasta 10 puntos por encima de la media de la UE, que ha retraído el consumo energético hasta el 30% en algunos casos.
Es una situación grave que, según fuentes de la Administración, está obligando a algunas de las grandes empresas a replantear hasta sus contratos de suministro. Porque las grandes empresas están acogidas a sistemas de compra de energía que pueden ser más baratos que el común a cambio de aceptar ser desenchufadas de la red en caso de necesidad. El sistema, denominado de interrumpibilidad, prevé unos mínimos de consumo que algunas compañías ven difícil de cumplir.
Entre las comunidades a cuyos datos ha tenido acceso este periódico, los descensos más acusados se concentran en las más industrializadas. País Vasco (28%), Navarra (21%), Comunidad de Valencia (19%), Madrid (15%) y La Rioja (18%) son las más afectadas por el parón en el consumo.
La demanda resiste el vendaval de la crisis, mal que bien, en el sector residencial y en el sector servicios. En el primer caso, la caída de la demanda ronda el 3%. Un porcentaje significativo si se tiene en cuenta el duro invierno pasado. Por su parte, el sector servicios aguanta mejor el embate. El consumo, según datos de las empresas, sólo ha caído un 1,3%.
Donde sí se nota el cambio en la coyuntura económica es en el número de enganches que se piden a las empresas. Con la construcción paralizada, compañías como Endesa manejan datos de caída muy gruesos. La fiesta empezó a decaer en septiembre del año 2007. Y ahora tiene tintes de entierro. En el conjunto del año 2008, el número de solicitudes de nuevos suministros eléctricos cayó un 20% respecto a 2007. En lo que va de año, la caída es mayor: el 25% si se compara con el mismo periodo de 2008.
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