Almería y Sevilla tendrán una línea aérea con carácter de servicio público

El Gobierno central y la Junta de Andalucía darán hoy el primer paso para la creación de un servicio público de transporte aéreo entre Almería y Sevilla, consideración que permitirá la financiación pública de una línea entre ambas ciudades con unas determinadas exigencias de frecuencia y plazas para la operadora que la explote.

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y el consejero de Obras Públicas, Luis García Garrido, tienen previsto firmar hoy en Madrid un convenio de colaboración para la financiación de este servicio. El ministerio se compromete a que el Consejo de Ministros declarará como servicio público la línea aérea Sevilla-Almería, que se justifica en facilitar el transporte interior en la comunidad autónoma andaluza entre la capital administrativa y una de sus principales capitales.

Entre Sevilla y Almería se requieren ahora más de cinco horas, pero además la futura alta velocidad ferroviaria nunca garantizará unos tiempos mínimamente comparables al que será posible entre las demás capitales andaluzas. Se estima que el viaje en avión entre Sevilla y Almería requerirá unos 50 minutos, cuando la alta velocidad ferroviaria apenas bajaría de cuatro horas.

40.000 viajes al año

Una vez que se produzca la declaración, se convocará un concurso público para la adjudicación de la explotación del servicio. En principio, la Junta exigirá un mínimo diario de dos vuelos por cada sentido de lunes a viernes y uno los fines de semana, en aparatos de al menos 48 plazas. La Junta estimó en su día una demanda potencial de 40.000 viajes anuales. Sea esa u otra, se estipulará una cantidad en el contrato con la operadora con el compromiso de la administración autonómica de financiar la diferencia si no se llegara a cubrir la demanda que se estipule.

La consideración de servicio público permite además establecer una serie de ayudas y subvenciones para la explotación de la línea.

Sevilla y Almería ya han formado parte de rutas de compañías aéreas regionales como Binter, pero nunca resultaron rentables. En noviembre de 2008, el presidente de la Junta informó de que tres compañías se habían interesado por el proyecto, aunque se reservó sus nombres.