Los políticos vascos se confiesan en el libro 'Memoria de Euskadi'

El diván de María Antonia Iglesias ha vaciado a 32 políticos vascos. La periodista presentó ayer en Madrid su libro Memoria de Euskadi (Aguilar), una ingente obra de 1.326 páginas en las que repasa la historia del País Vasco desde la Transición a través de 32 entrevistas. Iglesias lamentó no haber podido charlar con algún miembro de la izquierda abertzale a pesar de tantear, dijo, en varias ocasiones al entorno de Arnaldo Otegi, portavoz de la ilegalizada Batasuna. Hablan desde José Antonio Ardanza, lehendakari entre 1985 y 1999, hasta Patxi López, candidato socialista en las elecciones autonómicas del 1 de marzo.

En una charla con el periodista Iñaki Gabilondo, Iglesias denunció la falta de comunicación entre los políticos vascos. "Ya que no se hablan entre sí al menos que se lean". Tras dos meses entrevistándose con los protagonistas, la autora destacó que todos ellos tienen una raíz común: el orgullo de ser vascos.

"Los políticos del País Vasco están demonizados, por eso necesitaban hacerse notar y hablar más allá de su ámbito de actuación", declaró la periodista. De los 32 entrevistados, Iglesias destacó la figura de Ramón Jáuregui, ex secretario general del PSE. "Es un ejemplo para la sociedad vasca por su búsqueda de la conciliación y la paz". La periodista no se mordió la lengua al hablar de la situación del PNV. "Han perdido tres años para consolidarse como el gran partido del País Vasco. Están cambiando de giro en alta mar y con tormenta".

Enemistades internas

El libro pone de manifiesto enemistades en el seno de los distintos partidos. El testimonio del portavoz parlamentario del PP vasco, Leopoldo Barreda, pone al descubierto su percepción de María San Gil, ex presidenta del PP en el País Vasco. Narcisista y vanidosa son algunos de los adjetivos que le dedica Barreda a su antigua compañera de partido.

Quien también optó echar pelillos a la mar fue Iñigo Urkullu, presidente del PNV. "Mi relación con Ibarretxe la vivo con muchas dificultades". Estas declaraciones las grabó María Antonia Iglesias en el verano de 2008. "Hay muchos días en los que tengo que hacer actos de fe para que sigamos unidos y tengamos una mínima cohesión para salir dignamente de esta situación de cara al futuro", confiesa en uno de los capítulos.