_
_
_
_
_
La nueva Casa Blanca

Corea del Norte agita la amenaza de un misil de largo alcance

La tensión nuclear ha vuelto a la península coreana. Corea del Norte anunció ayer que se dispone a colocar un satélite en órbita, y provocó las sospechas de los países vecinos y Estados Unidos de que en realidad va a probar un misil de largo alcance. "Los preparativos para lanzar un satélite de comunicaciones experimental Kwangmyongsong-2 mediante el cohete Unha-2 avanzan a todo ritmo", aseguró el comité espacial norcoreano, según la agencia oficial KCNA.

En 1998, Pyongyang disparó un misil Taepodong-1 por encima de Japón, con el mismo argumento, lo que provocó las iras de Tokio y sus aliados. En esta ocasión, podría tratarse del Taepodong-2, con un alcance de 6.700 kilómetros, frente a los 2.500 kilómetros del modelo anterior.

De tener éxito la prueba, significaría que Corea del Norte cuenta con un arma diseñada para alcanzar Alaska -aunque no otros Estados de EE UU-, quizá con una cabeza nuclear.

El anuncio de Pyongyang es visto como un intento arriesgado de presionar a la Administración del presidente estadounidense, Barack Obama, y a Corea del Sur y Japón, para que suavicen su postura con Corea del Norte.

Al mismo tiempo, da un aviso del descontento que ha generado en Pyongyang la decisión del presidente surcoreano, Lee Myung-bak, de adoptar una línea dura con el Norte desde que llegó al cargo hace un año. El régimen de Kim Jong-il ha incrementado recientemente la retórica contra Seúl, y ha dicho que está "totalmente preparado" para la guerra.

Durante su gira por Asia de la semana pasada, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, lanzó una seria advertencia a Corea del Norte para que cumpla su compromiso de desmantelar su programa nuclear. Pyongyang ha aceptado poner fin a los planes de armamento atómico a cambio de ayuda económica y otros incentivos.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Pyongyang sólo ha ensayado en una ocasión el Taepodong-2, su cohete de más largo alcance. Ocurrió en 2006, pero fue un fracaso, ya que estalló a los 40 segundos del lanzamiento. Los expertos afirman que Pyongyang no posee tecnología para fabricar una cabeza nuclear lo suficientemente pequeña como para instalarla en un misil, pero Corea del Norte ha estudiado la colocación de armas químicas y biológicas.

Los expertos están divididos sobre si el lanzamiento podría producirse en días o semanas. Los satélites espía vigilan continuamente Corea del Norte, y responsables de los servicios de inteligencia de Corea del Sur han informado de una gran actividad en la base de lanzamiento de Hwadae. Las dos Coreas permanecen técnicamente en guerra, ya que el conflicto (1950-1953) finalizó con una tregua, no con un tratado de paz.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_