Las Cajas Rurales provisionan 120 millones y su beneficio cae el 43,39%

Las 36 Cajas Rurales valencianas han provisionado 120 millones de euros para 2009 ante el riesgo del aumento de la morosidad y las recomendaciones hechas por el Banco de España para fortalecer la posición de las entidades frente a la delicada situación económica. Esta dotación extraordinaria ha comportado una caída de su beneficio neto anual del 43,39%, "una cifra nada habitual para las rurales", reconoció ayer la Federación de Cajas Rurales de la Comunidad Valenciana. Los 127,26 millones que obtuvo en 2007 se han reducido a 72,04, aunque fuentes de la federación matizaron que sin esta dotación el beneficio en 2008 hubiese crecido un 14%.

Lo que sí que se ha incrementado es su ratio de morosidad, que se situó en el 5,14%, con una tasa de cobertura del 57,43% (en 2007 fue del 1,28% con una cobertura del 184,7%). Las mismas fuentes no pudieron precisar la tipología del moroso, aunque indicaron que en diciembre de 2007 el 40% eran impagos relativos a adquisición de vivienda, el 10% correspondían a préstamos a promotores y el resto se debía a particulares. La ausencia de datos actuales se justificó en la dificultad de obtención por la independencia de las cajas y la desigualdad de volúmenes de cada entidad.

Arnandis reivindica las cooperativas de crédito como tercer activo financiero

Las Cajas Rurales dieron más créditos en 2008, un 3,57% (15.000 millones), aunque el pasivo administrado, las imposiciones, cayó un 2,38% (13.838.859). La federación admitió esa pérdida, aunque subrayó que no ha comportado problemas de liquidez. El beneficio de explotación de las Cajas Rurales también sufrió un retroceso del 5,24%, con 203 millones frente a los 214 del ejercicio anterior, aunque insistieron en que la cuenta de pérdidas y ganancias refleja "un incremento de los rendimientos financieros superior al 21%".

El presidente de la federación, Cirilo Arnandis, manifestó que el enfriamiento del sector inmobiliario y el temor a un repunte de la morosidad no han restado solidez a los resultados. Asimismo, reivindicó la posición de las Cajas Rurales valenciana como "tercer activo financiero de la Comunidad Valencia" y su liderazgo en algunas comarcas. Arnandis apeló a su cuota de mercado del 13% en depósitos y del 8% en créditos, "muy superiores a las que representa este sector a nivel nacional". Fuentes de la federación no quisieron ayer aventurar ninguna previsión para el presente ejercicio: "2009 es complicado, y 2010 ya veremos". Arnandis aseguró que las Cajas Rurales están preparadas para adaptarse a una coyuntura menos favorable en el presente ejercicio debido, añadió, a que "gozan de buena salud y tienen diversificado el riesgo".

La federación quiso desmarcar a las Cajas Rurales del resto de entidades y circunscribirlas a su ámbito de cooperativas de crédito y su objetivo de banca comercial: "captar y conceder". Con todo, los expertos consideran que su vulnerabilidad es mayor por su inferior capital y colchón de dotaciones. Una de ellas, Ruralcaja, supone el 50% del conjunto. Luego hay seis cajas medianas y el resto, pequeñas. En los primeros nueve meses de 2008 el beneficio neto de Ruralcaja había caído un 37%.