Casi 10.000 hogares se quedaron sin luz por las fuertes rachas de viento

No fue comparable al Klaus, pero ocasionó trastornos en la red de carreteras, en la de teléfonos y en el suministro eléctrico. El fuerte viento que sopló ayer -que llegó a alcanzar 155 kilómetros por hora en el faro de Cedeira- dejó a 9.863 usuarios sin electricidad. Los más afectados fueron los municipios de Xove, O Pino, Cesuras, As Somozas, Silleda, Vila de Cruces y Agolada. A última hora, sin embargo, la alerta pasó de naranja a amarilla, y el 112 anunció que la situación volvería a la normalidad a lo largo de la noche.

La lluvia inundó bajos de viviendas y ayuntamientos, y el tráfico permaneció cortado en 37 municipios por la caída de troncos. Además, 385.000 estudiantes se quedaron sin colegio porque la Consellería de Educación había cancelado las clases ante la alerta.

Unión Fenosa desplegó un operativo de 900 trabajadores

La situación se agravó, según adelantó Protección Civil, porque las propiedades ya afectadas por los vientos soportaron peor las embestidas. Se llegaron a cortar algunas pistas por la caída de árboles en Cedeira, hubo postes arrancados, farolas dobladas y problemas intermitentes con el suministro eléctrico en la comarca del Ortegal, donde Unión Fenosa envió a parte de los 900 operadores desplegados para evitar catástrofes como las del anterior ciclón.

La alcaldesa de la localidad costera de Valdoviño, Isabel Álvarez, señaló que el consistorio estuvo sin electricidad durante algunos minutos entre las 15.00 y las 17.00 horas cuando el viento "pegó con más fuerza". "Nada que ver con el temporal del otro día" precisó la regidora. En Ortigueira "la luz iba y venía", según la Policía Local. "Hubo varias incidencias, pero no son comparables con el último temporal", explicaron. El suministro eléctrico también se interrumpió en las parroquias de Couzadoiro, Mera de Arriba y San Clodio. La caída de un poste obligó a cortar la carretera ortegana del Baleo, mientras que en Cedeira, Protección Civil contabilizó hasta tres pistas cortadas por la presencia de árboles en la calzada.

Los bomberos de Ferrol atendieron numerosas llamadas para retirar tejas y cristales rotos, planchas metálicas y uralitas mal sujetas, además de talar árboles que cortaban vías en las parroquias del extrarradio ferrolano. Hubo cortes telefónicos en 210 líneas fijas y en 14 bases de telefonía móvil en las cuatro provincias.