El PSOE presiona para que se cumpla la prórroga de la deuda histórica
Los socialistas temen que el acuerdo no salga por el bloqueo en la financiación
El acuerdo entre los Gobiernos central y andaluz sobre la deuda histórica está asegurado, pero los socialistas andaluces albergan un "casi" que les preocupa. Según informó ayer el vicesecretario general del PSOE andaluz, Luis Pizarro, a un reducido grupo de periodistas, desde Sevilla no paran de enviar mensajes al Ministerio de Economía y Hacienda recordando que el 20 de marzo vence la prórroga para alcanzar un arreglo sobre la cuantificación de la deuda, después de que se incumpliera el primer plazo del 20 de septiembre de 2008 que marca el Estatuto de Autonomía.
Los socialistas confían en la palabra del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y del equipo económico de Pedro Solbes, especialmente después de la entrevista que el presidente Manuel Chaves y el vicepresidente José Antonio Griñán mantuvieron en la Moncloa el pasado 20 de diciembre.
El retraso de la firma hasta después de las gallegas cobra fuerza
El motivo principal de esa reunión fue la de abordar el nuevo sistema de financiación autonómica, pero los andaluces también plantearon que sin acuerdo sobre la deuda no habrá visto bueno al nuevo modelo. Y de Moncloa salieron convencidos de que el pacto está amarrado sobre la base de un mínimo de 1.148 millones de euros, la cifra más baja de la horquilla que maneja el Ejecutivo autonómico, cuya cota máxima sitúa en 1.742 millones.
Fuentes del PSOE aseguran que no hay ningún hecho concreto u objetivo que desbarate esa impresión, pero aún así no las tienen todas consigo. El motivo de este barrunto es que no hay fecha aún para el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), órgano en el que se debe aprobar el sistema de financiación autonómica tras la ronda de negociaciones bilaterales, por lo que temen, en sus peores perspectivas, que el calendario siga corriendo y se llegue al 20 de marzo -fecha en la que acaba la prórroga- y no haya anuncio sobre las compensaciones que debe recibir Andalucía por el déficit financiero con el que recibió varias competencias en los años ochenta. Aunque teóricamente un asunto y otro no tienen nada que ver (la deuda histórica es una negociación bilateral que colea desde 1981) todo el mundo es consciente de que es muy difícil que Madrid anuncie un acuerdo con Andalucía sobre el pago de la deuda cuando la financiación autonómica permanece bloqueada por las disputas sobre el dinero a repartir.
En este sentido, las declaraciones realizadas ayer por el portavoz del PSC, Miquel Iceta, de que no hay prisas por el acuerdo de financiación por cuanto para Cataluña lo fundamental es que el contenido se ajuste a lo que dictamina el Estatuto catalán añade algo de incertidumbre y lleva a pensar que la convocatoria del CPFF podría realizarse después de las elecciones gallegas del 1 de marzo. En esta línea, fuentes del Ministerio de Economía y Hacienda precisaron que "no tiene mucho sentido" que se firme un acuerdo sin saber quién gobernará en Galicia en los próximos cuatro años.
Otros dirigentes socialistas confían a pie juntillas en que habrá una cifra pactada sobre la deuda antes de que cumpla el plazo y sitúan el anuncio después de las elecciones gallegas coincidiendo con un acto del PSOE de ámbito regional al que previsiblemente asistirá Rodríguez Zapatero en marzo.
Pero por el momento la agenda del PSOE está marcada por el pleno parlamentario del jueves en el que se debatirán dos iniciativas del PSOE y del PP sobre un pacto por el empleo. Pizarro aseguró ayer que trabajarán por un acuerdo, algo que se antoja difícil cuando los populares han convocado una manifestación por el empleo el domingo.
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