Transportes admite que habrá más retrasos en la 'Y' por la amenaza de ETA

Como se barruntaba, el aumento de las medidas de seguridad en las obras del AVE vasco demorará su entrada en servicio. La última fecha apuntada por el Gobierno vasco era el año 2013. Ayer, la consejera de Transportes y Obras Públicas, Nuria López de Guereñu, aseguró que la construcción de la Y ferroviaria "probablemente se va a alargar en el tiempo", aunque no ofreció ningún plazo concreto. "Vamos a tardar más en disfrutar de las ventajas de alta velocidad", reconoció a Radio Euskadi.

Los plazos se han ido alargando en la mayor inversión pública de la historia vasca (el presupuesto superará los 6.000 millones de euros). Primero fueron los retrasos en su inicio -hasta 2007 no comenzaron a ejecutarse las obras de los primeros tramos de un proyecto en gestación desde los años noventa-, que llevaron a aplazar la fecha prevista de 2010 a 2013. Las amenazas de ETA a las constructoras, concretadas en el asesinato del empresario Ignacio Uria el pasado diciembre, supondrán otro aplazamiento más y un "sobrecoste", apuntó López de Guereñu. "No va a ser fácil. ETA pone todos los obstáculos que sabe poner de miedo y coacción", añadió.

En uno de sus últimos comunicados, la bajnda extendió sus amenazas a los técnicos de las constructoras, lo que ha causado una "preocupación importante", apuntó la consejera. "No es gusto de nadie estar en la diana, habiendo siendo mencionado de una forma más o menos directa en ese desagraciado comunicado que publicó ETA".

Reproches de la oposición

La titular de Transportes aseguró, pese a ello, que existe una "firme voluntad" para que las constructoras vascas sigan con el proyecto. "Queremos construir la

Y y queremos hacerlo de la mano de los empresarios de aquí", concluyó.

Sus manifestaciones merecieron ayer el reproche de la oposición. El portavoz del PSE, Rodolfo Ares, dijo que la sociedad vasca "no necesita mensajes derrotistas" que creen dudas sobre el proyecto. "Lo único que un responsable político tiene que decirle a la ciudadanía es que ETA no va a condicionar ni a tutelar las políticas que este país ha puesto en marcha a través de sus instituciones".

El secretario general del PP de Guipúzcoa, Borja Sémper, culpó directamente al lehendakari Ibarretxe: "Es el responsable de haber gestionado rematadamente mal [la construccion del AVE vasco] por rendirse ante ETA". Calificó de "dramático" que un gobierno democrático "demuestre tal debilidad ante la banda terrorista y que ETA condicione la infraestructura más importante de la historia del País Vasco".